Empleados públicos con discapacidad piden más medidas de apoyo para desarrollar su carrera profesional

Empleados públicos con discapacidad reclamaron este martes a la Administración más apoyos y medidas específicas no sólo en el acceso a la carrera funcionarial, sino también para garantizar el desarrollo de su carrera profesional sin ningún tipo de barreras.
Así lo han puesto de manifiesto en el transcurso de la jornada 'Empleados públicos con discapacidad: apoyos para una inclusión efectiva', organizada por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) y el sindicato CSI-F y que tuvo lugar este martes en Madrid.
La directora de la Oficina de Atención a la Discapacidad, María Luisa Peña, identificó la formación en materias como el inglés, las carencias en la adaptación de determinados puestos de trabajo, la ausencia de empleados públicos con discapacidad en los tribunales examinadores o las dificultades en el acceso a puestos de libre designación como algunas de esas barreras que todavía persisten para los empleados públicos con discapacidad.
En la misma línea, el secretario general del Imserso, Francisco Alfonso Ferrándiz, que sabe lo que es hacer carrera en la Administración con una discapacidad sensorial, admitió que el acceso a grados superiores sigue siendo una de las mayores dificultades para los empleados públicos con discapacidad. "No se trata solo de incorporar personas con discapacidad", afirmó, "sino que una vez dentro de la Administración se debe asegurar la empleabilidad de las personas con discapacidad y garantizar el desarrollo de su carrera profesional".
EL RETO DE LA INCLUSIÓN
La directora general de Función Pública, Carmen Sánchez, se comprometió en este sentido a continuar "evaluando y denunciando el no cumplimiento de las normativas relativas al empleo público en el ámbito de la discapacidad" y aseguró que "la inclusión supone un enriquecimiento cultural y social". "hay que luchar contra la desigualdad y no contra la diversidad", concluyó.
Pilar Villarino, directora ejecutiva del Cermi, se felicitó de la colaboración entre la Administración y el movimiento asociativo de la discapacidad, y reconoció que esta vía de cooperación "está dando sus frutos".
BARRERAS QUE PERSISTEN
El hecho de que persisten barreras en este ámbito se ilustró con el caso de Inma Mazón, una empleada pública de la Escuela Oficial de Idiomas a la que el pasado año 2013 la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid suprimió la ayuda que recibía mediante un profesor de apoyo que se encargaba de lo que ella no podía hacer, como firmar actas o corregir redacciones.
Las alternativas que le dio la Administración fueron que se pagase ella misma el profesor de apoyo, que solicitara otro puesto para el que no necesitara ayuda o una posible jubilación. "Ésta es la realidad de los empleados públicos con discapacidad: no hay voluntad, ni integración, ni adaptación", resumió Inma.
Carmen Sánchez, doctora en Medicina, incidió, por su parte, en el déficit de formación específica para personas con discapacidad en el ámbito público, así como en la persistencia de barreras físicas y sensoriales en el acceso al puesto de trabajo y en el mismo entorno laboral.
El asesor jurídico del Cermi, Óscar Moral, realizó un análisis de las denuncias presentadas por empleados públicos con discapacidad y recalcó que no sólo se refieren al acceso al empleo público, sino también a dificultades para el desempeño de su carrera profesional en el ámbito de la Administración.