España está a punto de cumplir con el protocolo de Kioto, asegura Ramos

Madrid, 5 oct.- España está a punto -a menos de un diez por ciento- de cumplir con el protocolo de Kioto, aseguró hoy el secretario de Estado de Medio Ambiente, Federico Ramos, que relacionó estos resultados con un reciente convenio de compra de emisiones de CO2 firmado con Polonia.

Según Ramos, con la partida marcada por los presupuestos, 40 millones, se ha conseguido más que con los 770 millones que se habían gastado hasta ahora para compensar la emisiones, con peores resultados.

"Hemos conseguido las mejores condiciones jamás obtenidas en materia de acuerdos de derechos de emisiones", subrayó Ramos, quien, por motivo de las cláusulas de confidencialidad del convenio, no reveló el precio al que se han comprado los derechos de emisiones ni su cantidad.

Sí aseguró que la compra está asociada a proyectos de energía limpia que se desarrollarán en Polonia y en los que podrán participar empresas españolas.

Federico Ramos, que viajó esta semana a Varsovia para firmar personalmente el convenio, subrayó que con el trato "nos quedamos muy cerca de cumplir nuestros objetivos" y aún queda margen para lograr los objetivos.

"España ha adquirido un compromiso muy importante y este gobierno ha hecho un enorme esfuerzo por cumplir el protocolo de Kioto dentro del marco de la Unión Europea y demostrar que se toma muy en serio la política medioambiental", declaró a la prensa durante un encuentro en su Despacho.

Y aunque reconoció que la compra de emisiones "no es la política que más nos gusta", indicó que, desde la UE ya habían alertado del riesgo de no poder honrar las metas internacionales marcadas, por el incumplimiento de España.

Desde Varsovia, el gobierno polaco anunció este jueves que el monto del acuerdo suscrito se dedicará al desarrollo de proyectos en los sectores de biomasa, la generación eléctrica a partir de biogás, y la mejora de la red eléctrica para la interconexión de proyectos eólicos.

España ha acudido también a Hungría, Letonia y la República Checa en busca de acuerdos para compensar con inversiones el aumento de sus emisiones por encima de los compromisos de Kioto, que estableció una reducción del 5 por ciento de la emisión de gases de efecto invernadero en 2012, con relación a 1990, para mitigar el cambio climático.