Eta. La audiencia juzga el viernes a los etarras inciarte y esparza por matar a tres personas en un secuestro


La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional juzgará este viernes a los etarras Juan Manuel Inciarte y Félix Ignacio Esparza, a los que se acusa de haber participado en el intento de secuestro en 1983 del teniente de la Policía Nacional Julio Segarra, una acción terrorista que acabó con el asesinato del oficial y de una pareja -un agente y su mujer embarazada- que habían sorprendido al comando en pleno rapto.
El fiscal encargado del caso, Daniel Campos, solicitará en el juicio que celebrará el viernes la Sección Segunda de lo Penal sendas penas de 101 años de cárcel para Inciarte y Esparza, a los que atribuye tres delitos de asesinato –uno de ellos en concurso con un delito de aborto- y un delito de detención ilegal.
El representante del Ministerio Público sostiene que los acusados, junto a sus compañeros del “comando Vizcaya” Enrique Letona, José Félix Zabarta (ambos ya condenados) y otros dos etarras conocidos como “Endika” y “Sebas”, eran los terroristas que intentaron secuestrar al teniente Segarra el 4 de mayo de 1983 en Santurce (Vizcaya).
Según el escrito de acusación del fiscal Campos, los etarras recibieron en Francia la orden, entre otras acciones, de secuestrar al oficial de la Policía y entraron a España en febrero cruzando la del Bidasoa en una “chalupa”. Sometieron al teniente a vigilancia y planificaron la acción.
A primera hora de la mañana del 4 de mayo, dos de los etarras robaron un vehículo en la localidad de Arriaga amenazando al propietario, al que dejaron bajo la vigilancia de dos miembros del comando. Los otros terroristas se dirigieron en el coche robado al garaje de la calle El Carmelo de Santurce donde Segarra guardaba su coche.
Los dos acusados así como Letona y Zabarte se escondieron en el interior del garaje mientras “Endika” vigilaba los alrededores. El teniente de la Policía llegó al lugar sobre las 8 de la mañana y se vio asaltado por los terroristas.
Cuando ya le habían amordazado y atado de pies y manos, entraron en el aparcamiento el cabo de la Policía Pedro Barquero y su mujer María Dolores Ledo, en avanzado estado de embarazo. El agente se llevó la mano a la pistola pero los etarras, tras matar de un disparo a quemarropa a Segarra, iniciaron un tiroteo que acabó con la vida de la pareja.
Además de los 101 años de cárcel, el fiscal solicita que Inciarte y Esparza indemnicen a los herederos de las tres víctimas con 180.000 euros para cada familia.

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