Expertos debaten en Valencia la sostenibilidad de la política social europea

Valencia, 8 sep.- Unos 270 investigadores y expertos en política social de 130 universidades y de 40 países debaten los desafíos a los que se enfrenta el modelo del estado del bienestar en Europa y su sostenibilidad en las próximas décadas, en una Conferencia Internacional que se celebra desde hoy hasta el sábado en Valencia.

El catedrático de Política Social de la Universitat de València y presidente del comité organizador, Jordi Garcés, ha presentado hoy, junto al copresidente de la Red Europea de Política Social ESPAnet, Jochen Clasen, esta convención sobre Sostenibilidad y Transformación de la Política Social Europea en las que se realizarán 125 presentaciones en tres días.

Estas exposiciones mostrarán los retos a los que deben hacer frente los estados europeos como la sostenibilidad de las pensiones, el envejecimiento medio de la población, las políticas de inmigración y las diferencias entre el modelo de estado bienestar escandinavo y mediterráneo, entre otros aspectos.

Entre sus ponentes destacan el profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona y de la Universidad de Harvard Jesús de Miguel, y la experta en pobreza de la Johns Hopkins University Katherine S. Newman, que explicará su teoría de la "familia acordeón" con la que examina la competitividad global de los mercados laborales para jóvenes y la permanencia de estos en el domicilio de los padres.

Jordi Garcés ha calificado esta reunión como "uno de los acontecimientos informativos más importantes de la política internacional que se han organizado en España en los últimos 15 años" y ha destacado el papel de la política social como elemento de cohesión social que ayuda a prevenir la conflictividad social.

Ha explicado que en estos momentos de crisis, en los que la política social es la que más recortes sufre, el objetivo es que esta área se convierta en "eficaz y eficiente para que el pastel del estado del bienestar no se acabe y pueda ser disfrutado también por las siguientes generaciones".

"Los europeos nos hemos acostumbrado a vivir muy bien con unos servicios que consideramos un derecho subjetivo de alta calidad, pero el individuo europeo debe entender que también tiene que invertir en su propio bienestar", ha apuntado Garcés, quien ha resaltado las diferencias entre el modelo escandinavo, "donde ahorran para sus últimos años", y el modelo mediterráneo, "donde se ahorra para pagar la hipoteca".

El presidente del comité organizador ha opinado que "la asignatura pendiente es la construcción de una política social europea", pero ha augurado que esa meta no se alcanzará hasta dentro de 25 o 30 años porque ni siquiera se ha alcanzado en España, "donde cada autonomía tiene una política social diferente, lo que provocará que cada vez haya más dependencia económica de los centros de poder como Bruselas y Alemania".

Garcés ha valorado la inclusión de un límite de gasto en la Constitución al argumentar que "a Alemania le ha ido muy bien, porque es bueno que se incluya un tope que indique que no se puede gastar lo que no hay, puesto que el endeudamiento infinito no es sostenible y los políticos deberían actuar en política igual que lo harían en las respectivas economías de sus casas".