Según ha informado el portavoz del Gobierno, Guillermo Martínez, en posterior rueda de prensa, estos fondos permitirán ofrecer respaldo a unas 3.300 familias de toda Asturias que, por su situación de privación, requieren de un ingreso extraordinario para atender necesidades básicas de los niños, como la alimentación, la ropa, el material escolar o los suministros generales de la vivienda.
La gestión de las ayudas, que ascienden a 700 euros por núcleo familiar, atendiendo a la propuesta de Unicef en esta materia, se realiza mediante acuerdos con los concejos a través de los servicios sociales municipales, dado que son los que mejor conocen la realidad de sus vecinos y pueden determinar quiénes precisan apoyo.
Así, el Ejecutivo explica en nota de prensa que el reparto por ayuntamientos se realiza en función de los parámetros que establece el indicador Arope (At risk-of poverty and exclusion), que es la tasa de riesgo de pobreza y exclusión social que combina la falta de recursos económicos con otros elementos como la carencia material y la baja intensidad en el empleo.
A lo largo del año pasado, estas subvenciones permitieron apoyar a 3.281 familias.
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