Francia quiere presionar a China y Rusia por su posición sobre Siria

París, 19 abr.- El presidente francés, Nicolas Sarkozy, justificó la reunión ministerial de hoy en París con países del "Grupo de amigos del pueblo sirio" para presionar a China y Rusia por su posición sobre el régimen de Bachar el Asad.

"A los chinos, como a los rusos, no les gusta quedarse aislados", dijo en una entrevista a la emisora "Europe 1" al ser preguntado por la conferencia que hoy reúne en París a un mínimo a 14 delegaciones y a la que asistirán los jefes de la diplomacia de Estados Unidos, Francia, Alemania, Jordania, Marruecos, Catar y Arabia Saudí.

Sarkozy se declaró "convencido de que el régimen de Bachar al Asad está condenado" y reiteró que la solución son los pasillos humanitarios.

Insistió en que Al Asad miente con sus mensajes conciliadores y que "quiere borrar del mapa Homs (la ciudad símbolo de la rebelión) como (el derrocado líder libio) Gadafi quería borrar del mapa Bengasi", cuna de la revolución en el país norteafricano.

El martes hubo otra reunión en París de una cincuentena de países y organizaciones implicadas en las sanciones a Damasco, que mostraron su "firme desaprobación de todo apoyo financiero o de otro tipo, en particular la venta de armas" al régimen, una alusión indirecta lanzada en particular contra Rusia.

La reunión de hoy se inicia a las 18.00 locales (16.00 GMT), y está prevista una conferencia de prensa una hora y media después, antes de que los asistentes participen en una cena de trabajo ofrecida por el ministro francés de Asuntos Exteriores, Alain Juppé.

El propio Juppé estimó hoy en una conferencia de prensa sobre el balance de la acción exterior francesa en este quinquenio que este encuentro llega "en un momento crucial en la crisis siria", por la necesidad de actuar ante la falta de cumplimiento por las autoridades sirias de los compromisos adoptados.

Se busca, indicó, ver si se puede contribuir al despliegue de una "fuerza real de observadores bien equipados y con medios para desplazarse, y si no fuera posible, estudiar qué otras medidas se deben tomar para detener la masacre".

"Francia no confía en que Al Asad y su Gobierno mantengan sus compromisos", indicó el ministro, según el cual aunque la situación en ese país "amenaza la paz y la seguridad en todo el mundo", y "hay que hacer todo lo posible por evitar una intervención armada".

Y en la línea con lo expresado por Sarkozy, Juppé lamentó que "Rusia sigue encerrada en una visión que la aisla de la comunidad internacional", y sostuvo que la única manera de ganar al régimen sirio es la unión de todos los países.