Galicia. Varón marroquí o senegalés, perfil habitual de víctima de trata laboral

En Galicia pueden distinguise dos perfiles diferenciados en el ámbito de la trata de personas. El de la víctima de trata laboral es un varón procedente de Marruecos o Senegal, y el de la víctima de trata sexual es una mujer procedente de Brasil o Rumanía.
La secretaria general de la Igualdad de la Xunta de Galicia, Susana López Abella, informó hoy en el Parlamento gallego de las conclusiones del estudio exploratorio sobre el tráfico de personas, elaborado dentro del marco del proyecto europeo Itíneris, en el que la Xunta de Galicia participó como socia, junto con los gobiernos de Brasil y Portugal, entre los años 2010 y 2013.
Según el estudio, otra de las diferencias es la forma de captación de las víctimas. En el caso de explotación sexual el método de contacto suele ser a través de amigos, conocidos e incluso familiares. Mientras, para la explotación laboral, se recurre a redes más formalizadas (agencias o intermediarios sin vinculación emocional con la víctima).
El estudio pone de manifiesto las dificultades para detectar situaciones de trata, ya que las potenciales víctimas suelen ser personas inmigrantes en situación irregular que normalmente no denuncian porque ni tan siquiera tienen conciencia de que están siendo víctimas de un delito contra los derechos humanos.
Por lo tanto, la carencia de datos y de registros específicos imposibilita un conocimiento de la dimensión real del fenómeno y, en consecuencia, de la construcción de un plan de acción acorde sus características.
El estudio, afirma la Xunta, se hizo con el objetivo general de ahondar en la protección de los derechos de los inmigrantes, prevenir la migración irregular a través de campañas de información en el país de origen, mejorar la capacidad de las administraciones estatales para luchar contra esta lacra y fortalecer la cooperación nacional e internacional.