Juan Cotino anuncia la declaración de 4 nuevos Parajes Naturales Municipales

Valencia.- El vicepresidente tercero y conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, Juan Cotino, han anunciado hoy que el Consell declarará cuatro nuevos parajes naturales municipales antes de que finalice el año, han informado fuentes de la Generalitat.

Cotino ha realizado estas declaraciones durante su visita al Barranco de la Hoz, en el término municipal de Enguera, que ayer fue declarado como Paraje Natural Municipal por el pleno del Consell.

La Comunitat Valenciana cuenta con 56 parajes naturales municipales que suman un total de 25.760 hectáreas protegidas, de ellos 28 en la provincia de Valencia, 18 en la de Castellón y 10 en Alicante.

La Conselleria de Medio Ambiente ha declarado 4 Parajes Naturales Municipales en 2010: la Serra de Chiva, La Colaita de Llombai, Barranc de la Fosch en Montesa y el Barranco la Hoz en Enguera.

El Paraje Natural del Barranco de la Hoz cuenta con una extensión de 1.009 hectáreas y está conformado por una red de profundos barrancos que representan un paisaje de gran espectacularidad y belleza en el que destacan hitos como el Cerro del Sancho y la Ventana de la Hoz.

Se trata de una extensa zona montañosa ocupada por matorrales y fragmentos de formaciones forestales de gran interés para la fauna silvestre. Destaca, también, la presencia de la microrreserva de flora denominada El Chorrillo.

Dentro de la vegetación destacan los arbustos y matas semileñosas, muchas de ellas aromáticas. En la composición florística actual destacan las especies rebrotadoras y adaptadas al fuego, como la coscoja, el lentisco, el enebro, el palmito, la sabina, la cornicabra, el madroño, el aladierno, el brezo, la aliaga o el romero, entre otros.

En los enclaves más profundos y umbríos de los barrancos, con un microclima más húmedo y fresco se encuentran especies como el fresno de flor, la adelfa o baladre, la caña, el poleo blanco o el mirto.

Además, entre la vegetación del Barranco de la Hoz, en las zonas de roquedo, cabe resaltar la presencia de la grasilla, una planta insectívora, o el rabo de gato lanoso, un endemismo del Macizo del Caroig, y la pelosilla de cueva, endemismo de la Comunitat.

Respecto a la fauna, los acantilados constituyen un medio favorable para el asentamiento de rapaces de alto valor ecológico como el águila perdicera, el águila real o el halcón peregrino.

Dentro del grupo de los anfibios y reptiles destaca la presencia del gallipato, en peligro de extinción, o el lagarto ocelado, la culebra bastarda o la víbora hocicuda, entre otros.

Entre los mamíferos, en el Barranco de la Hoz, podemos encontrar a la musaraña común, la musaraña enana y el erizo europeo. También hay que resaltar la presencia de quirópteros como el murciélago común, el murciélago grande de herradura y el de cueva.

Además, de sus valores medioambientales, tanto de flora como de fauna, destacan los numerosos elementos patrimoniales como La Cueva Santa (santuario de la época medieval), las pinturas rupestres del Charco de la Pregunta, diferentes yacimientos arqueológicos y el Caserío del Benacantil.