La ayuda de españa a las crisis humanitarias ha caído un 90% desde 2010


Los fondos públicos de la acción humanitaria española han descendido un 90% desde 2010, cuando tocó techo con 465,03 millones de euros, por los 38,84 millones del año pasado, según el informe ‘La acción humanitaria en 2013-2014: una respuesta tardía’, elaborado por el Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (Iecah) y Médicos Sin Fronteras (MSF).
El informe, presentado este martes en una rueda de prensa en Madrid, señala, por el contrario, que los países donantes aportaron un récord de 22.000 millones de dólares (unos 17.700 millones de euros) a fondos de ayuda humanitaria, aunque un tercio de las necesidades de las crisis quedaron sin atenderse debido al incremento de los desastres y de los conflictos en el mundo.
Francisco Rey, codirector del Ieach, afirmó que la ayuda humanitaria española es “la política pública más recortada” en los últimos años, a lo cual no encuentra “ninguna justificación” porque “las necesidades humanitarias siguen creciendo” y España, como miembro del Consejo de Seguridad de la ONU, debería llegar “por lo menos a los porcentajes de los países de nuestro entorno”.
Además, Rey indicó que el consenso internacional indica que la ayuda humanitaria de los países donantes debe situarse entre un 7% y un 10% de la Ayuda Oficial al Desarrollo, pero España se quedó en el 2,17% en 2013.
Subrayó que esta situación “ha limitado mucho la capacidad de respuesta” del Gobierno español en las crisis humanitarias internacionales, hasta el punto de que ha tenido que desembolsar tardíamente créditos extraordinarios para Siria y la epidemia del ébola.
Apuntó que estos recortes se producen “en un momento en que la capacidad técnica de la cooperación española es bastante buena” y que “no sólo se trata de fondos, sino de fomentar políticas”, como por ejemplo, atender la solicitud del Programa Mundial de Alimentos (PMA) al Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación para que el aeropuerto de Las Palmas de Gran Canaria sirviera como puente aéreo con las capitales de los países africanos más afectados por el ébola, que el Gobierno rechazó.
Jesús Núñez, también codirector del Iecah, mostró su “sorpresa” por que Exteriores desestimara tres meses después la demanda del PMA, lo que encuadró en “una visión cortoplacista” del Gobierno para eludir las respuestas humanitarias. “No hay ninguna justificación”, añadió.
RÉCORD DE FONDOS HUMANITARIOS
Por otro lado, el informe recalca que el año pasado se el récord de 22.000 millones de dólares (unos 17.700 millones de euros) de fondos aportados por los países donantes a ayuda humanitaria, pero precisa que “la respuesta internacional sigue sin estar a la altura de las crecientes necesidades y de las complejas crisis a las que debe enfrentarse”.
Esta cantidad supone un incremento del 27% respecto a los 17.300 millones de dólares (13.900 millones de euros) de 2013 y un 13% más que el récord anterior, fijado en los 19.400 millones de dólares (15.600 millones de euros) de 2010, año en el que ocurrieron el terremoto de Haití y las inundaciones de Pakistán.
Sin embargo, Rey precisó que “un 30% de las necesidades humanitarias quedaron sin satisfacer” tanto en 2013 como en 2014, teniendo en cuenta como “indicador sólido” los llamamientos de Naciones Unidas.
Rey apuntó, además, que las políticas humanitarias internacionales están caracterizadas por “la tardanza en la respuesta”, como, por ejemplo, en la epidemia de ébola.
Todo ello, en un contexto en que la ONU decretó el año pasado cuatro emergencias de nivel tres (el máximo de gravedad), concretamente en Filipinas, República Centroafricana, Siria y Sudán del Sur. Este número se ha elevado a cinco en 2014, que han coincidido de forma simultánea por primera vez en la historia reciente: ébola, Iraq, República Centroafricana, Siria y Sudán del Sur.
A este respecto, el director general de MSF, Joan Tubau, señaló que el conflicto de Siria ha alcanzado “un nivel de violencia y de odio extraordinario”, en parte por la aparición del Estado Islámico (EI) en el norte del país, y en medio de la mayor crisis de desplazados y de refugiados” de la actualidad.
Por ello, Tubau reclamó “una revisión profunda” del sistema humanitario internacional porque “no es capaz de reaccionar a las guerras y catástrofes y no tiene ninguna capacidad de mediar políticamente” para resolver las crisis.

Mostrar comentarios