La Catedral de Córdoba, un monumento "eclesiástico", "único" y "universal"

Madrid, 1 jul.- Expertos en el ámbito histórico, arquitectónico, cultural y económico han puesto hoy de manifiesto que la Catedral de Córdoba, antigua Mezquita, es un monumento "eclesiástico", "único" y "universal".

Durante su intervención en el foro que ha tenido lugar en la sede de la Agencia EFE en Madrid y que forma parte de los actos para conmemorar el 775 aniversario de la Catedral de Córdoba, el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha defendido hoy que por razones históricas y jurídicas la Iglesia católica es la titular de la Catedral de Córdoba.

Además, ha apuntado que no ve razones de utilidad pública para expropiarla, ya que en la actualidad todos los ciudadanos pueden disfrutar de ella.

El ministro ha destacado que todos los poderes legítimos que ha habido en España han reconocido siempre que la Iglesia católica es la titular de la Catedral de Córdoba y en ningún momento se ha planteado una discusión sobre la misma.

Por su lado, el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha asegurado que "atacar" a la Catedral de Córdoba es "atacar el corazón de la Iglesia", ya que el templo es una "necesidad vital" del organigrama del cristianismo.

Ha añadido que el templo es un monumento "singular", a la vez que "sagrado", si bien ha reconocido que la Iglesia es "consciente" de que, además de estar sirviendo para el culto cristiano, la Catedral hay que ponerla "al servicio y disfrute cultural y turístico".

Por su lado, el catedrático de la Universidad de Deusto, Fernando García de Cortázar, que ha abordado los aspectos históricos del edificio, ha resaltado que en el año 786 los musulmanes construyeron la mezquita principal "reutilizando parte de los materiales de la primitiva iglesia", una basílica visigoda del siglo VI.

Ha explicado que, cuando Fernando III arrebató la ciudad de Córdoba a los musulmanes, en ella retornó el culto cristiano, y, según las leyes del momento, el templo era propiedad del rey que conquistaba la ciudad.

Sin embargo, finalmente se cedió su titularidad a la Iglesia católica, y el 20 de junio de 1239 tuvo lugar su consagración como Catedral por parte del obispo Lope de Fitero, de tal forma que la Capilla Mayor fue situada bajo uno de los lucernarios de Alhakan II, en el rico ámbito de la mezquita del siglo X.

Por su parte, uno de los arquitectos conservadores de la Catedral de Córdoba, Gabriel Ruiz Cabrero, ha subrayado el "buen cuidado" que ha hecho el Cabildo del edificio y ha puesto de manifiesto que las técnicas constructivas del monumento "son romanas".

Ha incidido en que "formalmente" en 1236 todos los templos "eran iguales, "ya fueran sinagogas, mezquitas y catedrales", de ahí que "constructivamente el edificio se conservara con tanta naturalidad".

Ruiz Cabrero ha resaltado que el templo está "divinamente conservado", gracias, principalmente, a la "conservación de su uso", ya que lo contrario sería un monumento "muerto" que se convertiría en un "elemento arqueológico".

Asimismo, ha apuntado que las "agresiones" que recibe el edificio se circunscriben a "la polución" o a elementos naturales "como la lluvia", mientras que los visitantes "no suponen una agresión", ya que "son muy respetuosos".

Además, ha asegurado que cada día "se están descubriendo cosas" nuevas sobre el edificio, que es uno los "más permisivos a la ahora de hacer investigadores".

Por su lado, el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Córdoba, Antonio Palacio, ha destacado que la Catedral es un referente "turístico, cultural, único y de trascendencia universal y singular".

Ha apuntado que es el monumento "más importante de Córdoba y de los más importantes de España" y ha destacado que su renovación de la declaración de patrimonio de la humanidad por parte de la Unesco con el "plus de valor excepcional" lo convierte en "único".

Palacio ha puesto de manifiesto que el monumento fue visitado el pasado año por más de 1,4 millones de visitantes, y su crecimiento es "continuo cada año", mientras que genera "un centenar de puestos de trabajo directos y cerca de 1.500 indirectos".

Finalmente, ha considerado que "no hay problema" respecto a la denominación del templo y ha ironizado que, si se tuviera que cerrar por obras de restauración, sería "un pequeño problemilla" para la ciudad, al quedarse sin su "principal fuente de ingresos" económicos.