La cúpula de Interior, reunida para analizar la presión migratoria

  • La cúpula del Ministerio del Interior, presidida por el ministro Jorge Fernández Díaz, ha comenzado a la una de la tarde la reunión para analizar la situación de presión migratoria de los últimos días y estudiar posibles refuerzos para hacer frente a la misma.

Madrid, 13 ago.- La cúpula del Ministerio del Interior, presidida por el ministro Jorge Fernández Díaz, ha comenzado a la una de la tarde la reunión para analizar la situación de presión migratoria de los últimos días y estudiar posibles refuerzos para hacer frente a la misma.

En el encuentro participan, además del ministro, el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, y el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa.

También asisten el jefe del Estado Mayor, Antonio Barragán, y el comisario general de Extranjería de la Policía Nacional, Emilio Baos, entre otros altos mandos.

El ministro Jorge Fernández Díaz ha interrumpido sus vacaciones para asistir a esta reunión de trabajo, al igual que la mayoría de los participantes en el encuentro, han confirmado fuentes de Interior.

Fernández Díaz ha estado en los últimos días, desde el primer momento, en contacto con las delegaciones del Gobierno implicadas en la llegada masiva de inmigrantes, para seguir puntualmente el desarrollo de los acontecimientos.

La reunión se convocó después de que el lunes fueran interceptados en aguas del Estrecho unos trescientos inmigrantes y ayer continuara una llegada masiva que sumó mas de novecientos.

Además, ayer lograron saltar la valla de Melilla unos ochenta inmigrantes, en tres asaltos protagonizados por unos 750 subsaharianos, tras lo que hoy otros seiscientos lo han intentado.

Al mismo tiempo que se celebra reunión en Interior, el ministro marroquí del Interior, Mohamed Hasad, ha reconocido que la llegada masiva de inmigrantes irregulares a las costas españolas se ha debido a "disfunciones que han podido suceder".

Esas disfunciones, que no ha precisado, "serán corregidas muy rápido", según el ministro, quien ha asegurado que está en contacto "regular" con su homólogo español.

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