La Presidencia egipcia dice que no se ha excluido a islamistas del Gobierno

El Cairo, 16 jul.- La Presidencia egipcia aseguró hoy que no se ha excluido a ningún sector de la sociedad ni a los islamistas del Gobierno de transición que forma en la actualidad el primer ministro del país, Hazem al Beblaui.

El consejero de comunicación de la Presidencia, Ahmed al Muslimani, dijo en rueda de prensa que hay carteras ministeriales que han sido propuestas al Partido Libertad y Justicia, brazo político de los Hermanos Musulmanes, y al partido salafista Al Nur, aunque no ofreció detalles sobre la respuesta de estos grupos.

Al Beblaui tiene previsto terminar hoy la formación del Ejecutivo, uno de los pasos del proceso de transición comenzado después de que las Fuerzas Armadas egipcias depusieran el pasado día 3 al presidente Mohamed Mursi.

Al Muslimani instó a los manifestantes islamistas seguidores de Mursi a que participen en la vida constitucional.

"Respetamos la voluntad del pueblo y abrimos nuestras puertas a todos, incluido el grupo de los Hermanos Musulmanes, para que sean participantes en la patria", añadió Al Muslimani, quien invitó a todas las fuerzas políticas a la reconciliación nacional.

Además, reiteró que Mursi se encuentra en un lugar seguro y que goza del respeto adecuado para un expresidente.

El portavoz anunció que el presidente interino, Adli Mansur, ha elegido como consejero para Asuntos Científicos a Esam Hegy, profesor de Ciencias en la Universidad de El Cairo.

Al Muslimani hizo referencia también a las "presiones externas" que afronta el país y denunció algunos comentarios de responsables turcos sobre la situación de Egipto.

"Ankara debe respetar la soberanía egipcia y la voluntad del pueblo... No aceptamos ninguna injerencia en los asuntos internos de Egipto", agregó.

El ministro de Asuntos Exteriores turco, Ahmet Davutoglu, ha declarado que Turquía sigue considerando a Mursi como el presidente legítimo de Egipto, según publicó hoy el diario turco "Sabah".

El jefe de la diplomacia turca criticó el golpe de Estado militar en Egipto, subrayó la legitimidad de las elecciones ganadas por Mursi y lamentó que el Gobierno elegido en las urnas ya no tuviera poder alguno.