La Puerta de Alcalá se llena de lazos en recuerdo a los niños víctimas de las guerras

Madrid.- La Puerta de Alcalá se ha llenado hoy de lazos rojos en señal de apoyo a los niños que sufren las consecuencias de los conflictos armados en un acto organizado por la asociación Mensajeros de la Paz, que ha recordado que el 65 por ciento de los damnificados por las guerras son menores.

Al acto han asistido, entre otros, la madrina de la asociación, la actriz Laura Valenzuela, y la autora del libro "Lazos y corbatas", Amaya Morera, que destinará todos los beneficios del mismo al proyecto de esta ONG "Casa de la Paz".

Con esta iniciativa, ha señalado a EFE el director de Proyectos de Mensajeros de la Paz, Javier García, se ha querido sensibilizar a la infancia "más favorecida" sobre la situación que viven los niños "más desfavorecidos", que viven en países que han sufrido la desgracia de un conflicto bélico y que necesitan asistencia médica especializada.

El acto, en el que niños y mayores han colocado lazos rojos con los que han unido los arcos de la Puerta de Alcalá, quería simbolizar la "entrada a la solidaridad" de los menores en un lugar que es, a su vez, el símbolo de entrada a Madrid, ha añadido García.

Ha explicado que el proyecto "Casa de la Paz" ha traído a España en los últimos cinco años a más de 300 niños para que fueran tratados de sus dolencias y ha agradecido a García su generosidad al donar los beneficios de su novela a la asociación que dirige el padre Ángel.

En estos momentos, ha apuntado el director de Proyectos de Mensajeros de la Paz, en la casa que la asociación tiene en Madrid viven seis niños que han venido de países como Congo, y que "han sufrido en sus carnes las consecuencias de diferentes conflictos, como amputaciones o lesiones que requieren tratamientos quirúrgicos que en sus países no pueden recibir".

Sobre la influencia que tiene la crisis en las aportaciones que recibe la asociación, García ha dicho que aunque la crisis es para todos y también "para la gente que hace solidaridad", las donaciones en conjunto no han bajado porque -ha asegurado- "cuanto más pobres más solidarios somos, ya que se entienden más las necesidades de los otros".

Ha reconocido, no obstante, que ha bajado la cuantía de las aportaciones nominales, pero lo más importante, ha insistido, es que haya más personas solidarias.

Por su parte, Laura Valenzuela ha animado a todos los presentes a unirse a este proyecto de Mensajeros de la Paz, porque aunque el dinero que aporten sea "muy poquito" significa una "gran ayuda" para los niños que sufren las guerras y el hambre y no tienen nadie que les proteja.