La sociedad civil reclama a los lideres de la UE y del G-20 la tasa bancaria

  • La Alianza Tasa Robin Hood, a la que pertenecen las principales ONG internacionales, ha reclamado a los líderes de la UE y del G-20 valentía para acordar la puesta en marcha de una tasa que grave las transacciones financieras para financiar políticas sociales.

Madrid, 14 oct.- La Alianza Tasa Robin Hood, a la que pertenecen las principales ONG internacionales, ha reclamado a los líderes de la UE y del G-20 valentía para acordar la puesta en marcha de una tasa que grave las transacciones financieras para financiar políticas sociales.

La Alianza, integrada en España por Ayuda en Acción, InspirAction, Intermón Oxfam, Plan, Acción por la Salud Global y Save the Children, realiza hoy en una veintena de ciudades diferentes actos para reclamar la tasa, coincidiendo con la reunión del G-20 en París.

En Madrid, un grupo de activistas ha representado la apertura de la "Bolsa del mercado por el desarrollo", en la que los protagonistas -la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, y Robin Hood- cortaban la cinta e inauguraban este nuevo sistema de financiación para luchar contra la pobreza.

"Es hora de pasar a la acción y de ser políticamente valientes. Estamos muy cerca de conseguir que esa tasa sea una realidad, ha habido avances muy importantes en la UE y en el G-20, pero ahora lo importante es que sea una realidad y que no sea una excusa para resolver de déficit fiscal y los problemas del sector financiero", ha explicado la portavoz de la Alianza, Susana Ruiz.

Por ello, las ONG insisten en que esta iniciativa debe destinarse a luchar contra la pobreza, a aliviar los efectos del cambio climático y a políticas sociales.

"Todos los recortes han ido dirigidos a los más vulnerables, por eso es fundamental que los sectores financieros, que han sido responsables de la crisis, también aporten su contribución y los resultados se repartan de una forma más justa", ha añadido.

Las organizaciones proponen que la tasa, del 0,05 por ciento, se aplique sobre productos que "no afecten a la vida corriente" de los ciudadanos, sino que se establezca para determinadas operaciones, como transacciones de acciones, emisiones de bonos, mercados de derivados financieros y transacciones en divisas, entre otros.

"Si esa tasa se aplicara en todo el mundo, estaríamos hablando de 300.000 millones de euros, suficiente para poder abordar de una forma más sólida los problemas que tenemos de desequilibrio en esos países, los recortes en las políticas sociales, junto a los problemas del cambio climático y de pobreza en el mundo", ha destacado.

La alianza reconoce que es complicado que haya un acuerdo global en el actual contexto de crisis, por lo que estima que sería importante que "hubiera un grupo de países que hagan un frente común para hacer fuerza para convencer al resto de que deben apoyar la iniciativa y romper el bloqueo existente".

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