La universidad, principio y final de Peces-Barba

Madrid, 24 jul.- Pasará a la historia como uno de los "padres" de la Constitución, pero la enseñanza y la universidad fueron la gran pasión de Gregorio Peces-Barba, que empezó y terminó su carrera profesional en esta institución académica.

Fallecido hoy a la edad de 74 años, Peces Barba estuvo muy ligado a la Universidad Complutense de Madrid, primero como estudiante y luego como profesor, y consiguió, tras abandonar la primera línea de la política, poner en marcha uno de sus proyectos académicos más ambiciosos: una universidad pública de calidad en el sur de Madrid.

La Universidad Carlos III comenzó sus actividades académicas en el curso 1990-1991, y la comisión rectora lo eligió como primer rector, un cargo en el fue sucesivamente elegido y que desempeñó hasta el año 2007.

El rector de esta Universidad, Daniel Peña, ha destacado hoy sus "innumerables" méritos académicos, profesionales y políticos, que le valieron el reconocimiento de toda la sociedad española y de todo el mundo jurídico.

El máximo responsable de la Universidad Carlos III ha expresado, en una nota de condolencia "colgada" en la página web de la institución, el dolor por la pérdida y la "enorme gratitud" por su entrega incondicional a esta Universidad.

En homenaje y como señal de duelo, las banderas de todos los campus de esta Universidad van a ondear a media asta durante toda la semana.

Gregorio Peces Barba estuvo vinculado a la universidad durante más de cuarenta años, y según han expresado hoy a EFE excompañeros del Liceo Francés -donde cursó Bachillerato- ésta fue su gran pasión: el mundo académico; han destacado, además, que una de sus etapas más felices fue el proceso de creación y el nacimiento de la Carlos III.

Se licenció en Derecho en la Universidad Complutense de Madrid, donde se doctoró "cum laude" con una tesis sobre el pensamiento social y político de Jacques Maritain, y posteriormente se licenció en Derecho comparado en la universidad de Estrasburgo.

En 1966 obtuvo la plaza de profesor numerario de Filosofía del Derecho en la Complutense, en la que, de 1976 a 1977, desempeñó el cargo de vicedecano de la Facultad de Derecho.

Peces Barba simultaneó la docencia con el ejercicio de la abogacía, una actividad por la que fue detenido en 1969, a raíz del estado de excepción; fue nuevamente arrestado en el año 1971 y suspendido del ejercicio de la abogacía durante tres meses por el Tribunal de Orden Público.

Al año siguiente comenzó su militancia en el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

En 1982 obtuvo, por concurso-oposición, la plaza de profesor agregado de Derecho Natural y Filosofía del Derecho en la Facultad de Derecho de la Complutense, y ese mismo año decidió no volver a presentarse a los comicios generales de ese otoño para dedicarse plenamente a la docencia.

Pero reconsideró la decisión, encabezó las listas de su partido, renovó el escaño de diputado por Valladolid y fue elegido presidente de la Cámara Baja en la segunda legislatura (1982).

Al finalizar la legislatura abandonó la política y volvió a la cátedra de Derecho Natural y Filosofía del Derecho, en la Universidad Complutense.

Desde junio de 1989, fecha en la que fue nombrado presidente de la Comisión Gestora de la Universidad Carlos III, centró sus esfuerzos en crear una universidad pública de calidad en los municipios del sur de Madrid (Getafe y Leganés) y en el de Colmenarejo, cuyo campus se inauguró posteriormente.

La universidad comenzó sus actividades en el curso académico 1990-1991, con Peces Barba como catedrático de Derecho Moral y Político.

En enero de 2008 impartió su lección jubilar "Reflexiones sobre la Justicia y el Derecho", en la Universidad Carlos III.

Además de su formación académica, Gregorio Peces-Barba era doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional de Educación a Distancia, por la Saint Louis University, por la Universidad de Vigo y por el Middlebury College.