Lord Lucan está oficialmente muerto pero el misterio de su desaparición vive

Parece el argumento de una película de suspense y, sin embargo, es una historia real. En 1974, el británico Lord Lucan, de 39 años, fue declarado principal sospechoso de la muerte de la niñera de sus hijos y de la agresión de Verónica, su mujer, después de que se evaporara misteriosamente tras su cruel asesinato. Hoy, 42 años después, el aristócrata ha sido declarado oficialmente muerto, permitiendo a su hijo heredar el título.

La Policía comenzó a sospechar del Lord cuando su mujer, que peleó con el asaltante en la oscuridad durante el ataque en su casa del lujoso barrio londinense de Belgravia, aseguró que se trataba de su marido, al que reconoció por su voz.

La última vez que se le vio en público fue inmediatamente después de los hechos, cuando se acercó al pub vecino The Plumber's Arms pidiendo ayuda. Después acudió a visitar a un par compañeros de partidas de cartas, ya que Lucan era un jugador profesional. En casa de sus amigos escribió dos cartas a su cuñado reivindicando su inocencia y dando instrucciones para saldar sus deudas con sus acreedores.

Tres días después, su coche, con rastros de sangre, fue encontrado abandonado en la costa sur de Inglaterra.

Nunca hubo juicio por aquel asesinato, pero la investigación llegó a la conclusión de que Lucan mató a la niñera creyendo que era su esposa, a la que quería eliminar porque de divorciarse le hubieran dado a ella la custodia de los hijos.Ahogado... o devorado por un león

Desde su desaparición, ha habido todo tipo de especulaciones. No en vano es uno de los mayores misterios de la alta sociedad británica. Algunos sostienen que se ahogó en su huida en el canal de la Mancha, otros dijeron haberlo visto en Colombia, Sudáfrica o Nueva Zelanda, e incluso que dispuso todo para ser devorado por el león de un amigo suyo para que no se encontrara su cadáver y su esposa se quedara sin heredar sus bienes.

La fascinación del caso se debe en parte a la personalidad de Lord Lucan, un hombre apuesto, elegante, jugador empedernido, el clásico vástago de una buena familia en el Londres hedonista de los años 1960. "Nuestra familia no tiene ni idea de cómo murió mi padre. Si se mató o lo mataron. Es un misterio y podría seguir siéndolo siempre", ha dicho su hijo este miércoles ante el tribunal.

El hijo de la niñera supuestamente asesinada por el séptimo conde de Lucan, también ha estado también este miércoles en el tribunal y ha expresado su alegría por el desenlace.

"Creo que está muerto. Es fantástico y estoy contento por él", por el hijo de Lucan, ha asegurado Neil Berriman, que ahora tiene 49 años y era un niño cuando murió su madre, Sandra Rivett.