Los talibanes no negociarán con el nuevo Gobierno afgano, "esclavo" de EEUU

Nueva Delhi, 24 sep.- Los talibanes afirmaron hoy que no negociarán con el nuevo Gobierno afgano del presidente electo Ashraf Gani, porque es un "esclavo" de Estados Unidos que "siempre protegerá los intereses" del país norteamericano.

"Mantener negociaciones con ellos no es la solución, pues se trata de una administración esclava de EEUU y carente de poder. Están obligados a proteger los intereses estadounidenses y a atender sus demandas", aseguró a la agencia afgana AIP un portavoz talibán, Zabiulá Muyahid.

Gani fue anunciado vencedor de los comicios afganos el pasado domingo, mientras que su contrincante, Abdulá Abdulá, pasará a ocupar la nueva figura de jefe del Ejecutivo en un Gobierno de unidad nacional surgido tras las denuncias de fraude electoral.

La mediación del secretario de Estado estadounidense, John Kerry, en la decisión de revisar todos los votos de la segunda vuelta de los comicios afganos y la predisposición de Gani y Abdulá a firmar un acuerdo de seguridad con EEUU, son otros de los puntos que aumentan el recelo talibán hacia la nueva administración.

Todo eso "contradice las aseveraciones que indican que Gani aceptará las demandas de los muyahidines. (...) Cualquier paso que dé Gani será en el interés de Estados Unidos, si no, no sería el líder de la administración", sentenció el portavoz talibán.

El 29 de septiembre Gani relevará al presidente saliente, Hamid Karzai, quien en un tono similar al de los talibanes aseguró ayer tras despedirse de su gabinete que "la paz y la estabilidad de Afganistán están en manos de extranjeros".

La guerra afgana se halla en uno de los momentos más sangrientos, casi trece años después de la invasión de EEUU y la caída de los talibanes, que en los últimos años se han reorganizado y aspiran a restaurar el régimen fundamentalista islámico que hubo entre 1996 y 2001.

El año pasado las fuerzas afganas se hicieron responsables de la seguridad tras la retirada paulatina de la OTAN, que culminará a finales de este año, aunque EEUU anunció que mantendrá a unos 9.800 soldados en territorio afgano hasta que concluya 2016.