Melendi: "Es en el directo donde ves si ese artista se cree lo que dice"

Ilusionado profesional y personalmente, con nuevo amor y disco nuevo entre las manos, Melendi arrancaba el pasado mes de mayo una extensa gira de más de veinte conciertos que le están llevando a recorrer toda España y que le mantendrán ocupado hasta el próximo mes de octubre.

Tras ocho años de convivencia y un hijo en común de cuatro años con la cantante Damaris Abad, conocida como 'La Dama', el asturiano puso fin a su relación y ahora rehace su vida junto a la actriz Julia Nakamatsu.

Siente que ha rejuvenecido junto a la actriz y orgulloso de la estupenda relación que mantiene con la madre de su hijo pequeño a sus treinta y siete años declara convencido ser "Un alumno más" de la vida.

CHANCE (CH): ¿De qué eres tú 'un alumno más'?

MELENDI (MLD): De la vida. Cada año siento, con más razón, que estoy en pañales en la vida, estoy empezando a entender las cosas pequeñas y a disfrutar de ellas. Soy un alumno más y lo seré toda la vida

CH: ¿Qué has aprendido en este tiempo?

MLD: A conocerme a mí mismo y saber cómo reacciono ante las diferentes situaciones, que es lo básico para empezar a crecer.

CH: Inmerso ahora con este disco una larga gira que está siendo masiva, ¿te sientes un privilegiado?

MLD: Sí, claro que sí, siempre me he sentido muy privilegiado por trabajar en lo que me gusta, que mi familia pueda vivir de ello y poder llegar cada vez a más gente es un orgullo. Virgencita que me quede como estoy, cada año que pasa me siento más agradecido. Y más en los momentos en los que estamos, tal y como está el país.

CH: ¿Qué diferencia hay entre el Melendi al que escuchamos en los discos y el que se ve en directo?

MLD: Hay más energía en el directo, es como si un río llegara al mar, pasas por todo el proceso creativo y expones todo lo que llevas dentro, lo sacas y lo entregas a la gente. La vibración y la energía de un artista no se puede plasmar en un cd, es en el directo donde ves si ese artista se cree lo que dice. Es donde más tienes que exigirte, para mi es el terreno en el que más gusanillo siento, donde me demuestro que valgo para esto y donde me gusta probarme.

CH: ¿Se hacen amigos dentro del mundo de la música?

MLD: Sí, son muchos años ya, sería autista si no los tuviera. Tenemos calendarios parecidos, coincidimos en eventos y comentamos las mejores jugadas. Es un mundo competitivo pero en nuestro país nos respetamos todos bastante más que en otros.

CH: ¿Qué retos te ilusionan ahora?

MLD: Me motiva mucho el desarrollo en Latinoamérica, más allá de los números por trabajar ese camino, tener algo nuevo que conseguir. Con los años estoy consiguiendo disfrutar del camino, una asignatura que yo tenía pendiente. Cada vez que me proponía algo, el camino hasta conseguirlo era sólo ansiedad, ahora he conseguido superar eso y disfrutarlo.

CH: ¿Te preocupa el paso de los años?

MLD: No, lo llevo bien, estoy en la mejor edad de mi vida, el cuerpo todavía me acompaña y la cabeza la tengo mejor, trata de disfrutar cada día de mis treinta y siete pero ya no soy un chaval, me van saliendo canas y alguna que otra arruga.

CH: Es un momento de reflexión y cambio de vida para ti...

MLD: Sí, llevo años reflexionando pero saco conclusiones tan contradictorias que prefiero no pronunciarlas para no tenerme que desdecir después. Soy bastante reflexivo y estoy en una época en la que creo que es necesario hacer un balance y saber hacia donde me dirijo porque al fin y al cabo los pasos que ahora doy son los que van a marcar la estabilidad de mi futuro que ya no está lejano y lo que quiero transmitir a mis hijos que son un presente. Mi hija mayor tiene ya diez años y ya no me deja darle besos delante de los amigos, es duro (ríe).

CH: ¿Cómo eres en tu papel padre?

MLD: Demasiado obsesivo, debería abrir más mi espectro pero me cuesta, tiendo a reproducir lo mismo que mi madre hizo conmigo, era un niño un poco enfermizo, con asma y me tenía un poco sobreprotegido. A mí me cuesta liberar esa sobre protección, poco a poco intento tener un poco más de manga ancha pero me cuesta.

CH: Te has separado de Dama y has rehecho tu vida con Julia...

MLD: Estoy feliz, especialmente con la situación que tengo con mi ex pareja, de eso me siento muy orgulloso, asusta ver lo bien que nos llevamos y lo fácil que ha sido todo. Somos dos personas que hemos compartido mucho juntos, nos hemos querido mucho y tenemos un hijo maravilloso en común, así lo hemos entendido. Yo no sabía que tenía la capacidad de hacer las cosas tan bien.

CH: Dama apuesta ahora por su carrera en solitario y tú la apoyas...

MLD: Por supuesto, muy contento de que le vaya bien, está haciendo además lo que ella quiere, ese ritmo latino que siempre le ha gustado y con el que me abrasaba en el coche.

CH: ¿Qué has encontrado en Julia?

MLD: Muchas cosas, es una mujer que está muy loca, como yo, muy dinámica, muy deportista, que está constantemente en movimiento. No le gusta perder ni un segundo de su vida, cuando compartes tu vida con una persona así te contagia. Me he rejuvenecido, yo que sé.

CH: Has elegido a Yumas, una marca mítica de los ochenta, para apoyarte en esta gira ¿Que hacías tú en los ochenta?

MLD: El mal.

CH: ¿Eres muy coqueto?

MLD: Ahora más que antes.