Papa reconoce que intervino por la paz en Colombia

  • El papa Francisco reconoció este lunes que intervino personalmente a favor del compromiso alcanzado por la paz en Colombia, en declaraciones a bordo del avión papal que lo conducía a Roma, tras su gira por Cuba y Estados Unidos.

"Estoy muy contento, siempre quise eso. Hablé dos veces con el presidente (Juan Manuel) Santos y no sólo yo. La Santa Sede trató de ayudar como podía", aseguró el pontífice argentino al ser interrogado sobre el compromiso de paz alcanzado la semana pasada entre el gobierno de Colombia y la guerrilla de las FARC.

"Cuando supe la noticia de que en marzo se iba a firmar el acuerdo final le dije al Señor: "haz que lleguemos a marzo, que se llegue con esta bella intención porque faltan pequeñas cosas, aunque existe la voluntad, de ambas partes, de las dos partes", agregó.

Tanto el gobierno colombiano como la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han reconocido la autoridad moral del papa Francisco y su rol clave al haber lanzado desde Cuba el 20 de septiembre pasado un llamado en el que instaba a las partes a no permitir que las negociaciones fracasaran.

El pontífice reiteró que "hay que esperar hasta marzo para que se firme el acuerdo definitivo y que queda pendiente el asunto de la justicia internacional", sin dar más detalles.

Tras aterrizar en el aeropuerto romano de Ciampino, hacia las diez de la mañana, el pontífice se dirigió a la basílica de Santa María la Mayor, como es su tradición, para agradecer a la Virgen por el viaje.

Durante el vuelo, el papa concedió una entrevista de unos 40 minutos a los periodistas que lo acompañaban.

Interrogado sobre los primeros bombardeos aéreos llevados a cabo el domingo por Francia contra el grupo Estado Islámico (EI) en Siria, el papa reconoció que "no había leído nada" y que no "entendía bien" el asunto.

"Cuando escucho las palabras bombardeo, muerte, sangre, respondo lo mismo que dije ante el Congreso estadounidense y en las Naciones Unidas: hay que evitar ello. Yo no juzgo la situación política porque no la conozco", precisó.

En la conversación con la prensa, Francisco fue interrogado sobre la crisis migratoria que azota Europa y las barreras de alambre de espinas que se construyen para impedir la entrada de refugiados.

"Es verdad, es una crisis de refugiados, como he dicho al Congreso (de EEU), ndr), nunca se había visto una crisis así desde la Segunda Guerra Mundial. Me pregunta sobre las barreras. Usted sabe cómo terminan los muros. Todos, todos los muros caen, hoy, mañana, o dentro de cien años, pero todos caen. No es una solución. El muro no es una solución", afirmó.

El jefe de la iglesia católica se refirió a los abusos de menores cometidos por religiosos y admitió que comprende a las familias que no perdonan

"Sí, los comprendo, rezo por ellos y no los juzgo", dijo.

"Rezo y pido a Dios, porque Dios es un campeón en buscar caminos de solución. Pido que lo arregle", agregó.

Francisco, que en pocos días preside una compleja asamblea de obispos en la que se debaten temas importantes sobre el futuro de la familia católica, abordó también la reforma que adoptó para facilitar la nulidad del matrimono católico.

"Aquellos que piensan en el divorcio católico se equivocan porque este último documento ha cerrado la puerta al divorcio, que podía entrar por la vía administrativa".

"Hacía falta reducir los procesos. Había procesos que duraban diez, quince años. Una sentencia, y luego otra sentencia, y una apelación y otra apelación y no se terminaba nunca", explicó.

El papa cerró la puerta al sacerdocio femenino, e insistió en que le gustaría visitar pronto China, un país que "amo mucho"

"Me gustaría mucho ir a China. Tenemos contactos, hablamos", dijo.

Pese a la dura agenda cumplida, el papa celebrará el miércoles la audiencia general y el domingo inaugura el Sínodo de la Familia.

jlv-kv/eg

Mostrar comentarios