Profesores y partidos, recelosos ante la ampliación del bachillerato

La Federación estatal de Trabajadores de la Enseñanza FETE-UGT y Juventudes Socialistas de España (JSE) mostraron este viernes su desconfianza ante la ampliación a tres años del Bachillerato anunciada por el ministro de Educación, tras la que a su juicio podría ocultarse la intención de concertar dicha etapa académica.
Para FETE-UGT, “esta reforma supone la pérdida de un curso de enseñanza obligatoria y una segregación del alumnado a los 15 años”.
Además, ampliar un año el bachillerato “genera dudas sobre la concertación de la postobligatoria”, afirmó el sindicato.
La misma idea expresó JSE, para quien esta medida “posiblemente provocará un aumento del concierto educativo de manera encubierta”.
“Es más que probable que se aumente la oferta privada sostenida con fondos públicos”, subrayó en referencia a la tradicional demanda de la escuela concertada. En declaraciones a Servimedia, el presidente de Ceapa (Confederación de padres mayoritaria en la escuela pública), Jesús Sánchez, señaló que eliminar 4º de la ESO solo aumentará la discriminación entre alumnos, y defendió una educación obligatoria con contenidos comunes hasta los 16.
PIDEN MÁS EMPLEO
Asimismo, Sánchez calificó de “nefasto” el anuncio de que ninguna Comunidad Autónoma (salvo Andalucía, País Vasco y posiblemente Canarias y Madrid) convocará oposiciones docentes en 2012.
“El fracaso escolar no se fragua en Bachillerato, sino en primaria”, apuntó, y “son los programas de acompañamiento y de refuerzo, en los que ahora se va a recortar, los que ayudan a combatir tal situación”, agregó Sánchez.
Según FETE-UGT, la congelación de la oferta de empleo público docente perjudicará la calidad de la enseñanza, ya que “aumentará el ratio de alumnos en clase y la inestabilidad de las plantillas”.
El sindicato de profesores ANPE instó por su parte a las administraciones educativas a ofertar el mayor número de plazas posible y a informar de “sus previsiones cuanto antes”.
“Es inconcebible que los futuros opositores, en fase activa y decisiva de preparación, no conozcan aún la oferta de empleo público”, resaltó.
A su juicio, la idea de alargar un año el Bachillerato resulta adecuada y positiva, aunque de ninguna manera se debe perder el carácter obligatorio de la enseñanza hasta los 16, concluyó.