Sao Paulo, 22 dic.- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, anunció hoy que estudiará mecanismos para combatir lo que tildó como "limpieza humana" que es promovida en algunas ciudades de Brasil contra las personas que viven y duermen en las calles.
El compromiso fue anunciado durante un acto de conmemoración de la navidad en el que la jefe de Estado participó hoy en Sao Paulo junto a unas 1.000 personas sin vivienda y miembros de cooperativas de trabajadores que se dedican a recoger basuras reciclables.
En el mismo acto la mandataria recibió una lista con los nombres de 142 personas que vivían en la calle y que habrían sido asesinadas este año por diversas razones, principalmente por una supuesta "limpieza social" promovida por grupos de parapoliciales.
"Muchas veces lo que está ocurriendo en una limpieza humana en las grandes ciudades de este país", admitió Rousseff en el discurso que pronunció en el acto
La presidenta dijo que, como la policía es controlada por los gobiernos regionales, dialogará con los gobernadores de los 27 estados del país para definir medidas de combate a la violencia contra quienes viven en la calle.
"El Gobierno tiene obligaciones para con la población de la calle y el primero de ellos es protegerlos de la violencia. El Gobierno realizará todo lo que esté a su alcance para impedir ese nivel de violencia en las ciudades que ustedes están denunciando", afirmó.
"Estamos abiertos para escucharlos y para buscar los mejores caminos. Mi gobierno tiene compromiso con los recolectores y con la población de la calle. Y no es un compromiso cualquiera. Es mi compromiso principal porque los 190 millones de brasileños tienen que tener derechos iguales y acceso a los mismos servicios. Si fracaso en este compromiso, habré fracasado en mi misión", afirmó.
Rousseff también anunció incentivos para que las personas dedicadas a la recolección de basuras reciclables se asocien en cooperativas y herramientas para ofrecerles capacitación a esos trabajadores.
"Nuestra mayor preocupación es construir cooperativas y asociaciones. Es garantizar que los recolectores de basura tengan la protección de una organización fuerte", afirmó.
"Les juro que haré lo posible y lo imposible para que las poblaciones que han sido marginadas en este país sean, tras mis cuatro años de gobierno, cada vez más poblaciones con derechos, con oportunidades y, sobretodo, con elevada autoestima", agregó.
Esta fue la primera vez que Rousseff participó como presidente de Brasil en la conmemoración de navidad con los recicladores de basura y las personas que viven en la calle, que fue realizada en la sede de un sindicato en Sao Paulo.
La mandataria ya había participado en actos similares como presidenta electa y como ministra del entonces presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), quien inició la tradición de celebrar la navidad con los recolectores de basura.
Rousseff se comprometió a acudir a la celebración de la navidad de estas personas hasta el final de su mandato.
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