Rubalcaba secunda a patxi lópez al defender a eguiguren del intento de “linchamiento”


El vicepresidente primero, portavoz del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, secundó este viernes al lehendakari, Patxi López, al advertir de que no tolerará ningún intento de “linchamiento” contra Jesús Eguiguren, y denunció a quienes intentan “pescar en río revuelto”.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Pérez Rubalcaba salió al paso de las interpretaciones que se están haciendo del juicio contra Arnaldo Otegi por enaltecimiento del terrorismo en el mitin de Anoeta, y aseguró que para saber lo que allí pasaría no hacía falta “hablar con nadie” y bastaba con consultar los medios de comunicación o Google los días previos.
Aseguró además que habla habitualmente con Eguiguren y no lo oculta, y lo hace tanto para mostrarse de acuerdo con él como para discrepar, y este mismo jueves lo hizo para secundar al lehendakari y dejarle claro que no va a tolerar ningún intento de “linchamiento” contra él.
Es “evidente”, aseguró, que ha ido como testigo al juicio contra Otegi porque lo solicitó la defensa del acusado, y se ha limitado a “cumplir con el deber de cualquier ciudadano de colaborar con la justicia”.
Si le llamó a declarar seguramente sería porque pensaba que podría “sacar algo” a favor de Otegi, pero a la vista de su testimonio mostró “serias dudas” de que realmente haya sido así.
Subrayó, además, que Eguiguren es el presidente de los socialistas vascos porque son ellos quienes le eligieron y no ha escuchado a ninguno de ellos cuestionar que deba seguir siendo así.
PESCAR EN RÍO REVUELTO
Al hilo de esa reflexión, el vicepresidente denunció a quienes están tratando de “pescar en río revuelto”, y precisó que no se refiere sólo a la izquierda abertzale, sino también a quienes sistemáticamente niegan cualquier veracidad a lo que diga Otegi salvo cuando sus palabras “se pueden utilizar” contra el Gobierno o contra los socialistas.
Pérez Rubalcaba respondió también a las últimas declaraciones de Brian Currin para insistir en que en el Gobierno “no queremos mediadores, no los queremos”, al margen de que Currin no parezca un mediador al uso sino más bien “entre Batasuna y ETA”.
En todo caso, reiteró que al mediador se recurre cuando hay un diálogo en el que mediar, pero ni lo hay “ni lo va a haber”, por tanto el Gobierno no los necesita “para nada, ni a Currin ni a ningún otro”.
Insistió, además, en descalificar el adjetivo “permanente” o “indefinido” para acompañar a la palabra “tregua” porque ambos términos forman un “oxímoron”, una contradicción en sí mismos, “como nieve negra o silencio estruendoso”, ya que la tregua es por definición interrupción de algo y, por tanto, temporal, y por ello mismo esa palabra “ya no vale”.

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