Situación de emergencia en Ceuta y Melilla: 80.000 inmigrantes quieren entrar

  • La cifra no es nueva, pero hoy el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, la ha vuelto a recordar. Unos 80.000 subsaharianos esperan en Marruecos y Mauritania la oportunidad de entrar en Ceuta y Melilla, un sueño que hoy han visto frustrado, de momento, 1.500 inmigrantes.

Madrid, 4 mar.- La cifra no es nueva, pero hoy el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, la ha vuelto a recordar. Unos 80.000 subsaharianos esperan en Marruecos y Mauritania la oportunidad de entrar en Ceuta y Melilla, un sueño que hoy han visto frustrado, de momento, 1.500 inmigrantes.

Tras la avalancha del pasado 6 de febrero que se saldó con quince muertos, Ceuta ha vuelto a ser escenario esta madrugada de un asalto masivo, el más multitudinario que se ha producido en la ciudad autónoma.

Un intento que se suma a las recientes entradas de más de 500 inmigrantes en Melilla en tan solo once días y que han creado una situación de "emergencia y delicada", en palabras del titular de Interior, quien ha vuelto a reclamar a la oposición una "política de Estado" en materia de inmigración y la UE que se involucre en un problema que le afecta.

Fernández Díaz ha afirmado que en Marruecos hay actualmente unos 40.000 inmigrantes, la mayoría subsaharianos, esperando para poder entrar en España y otros 40.000 están en Mauritania con la misma intención.

El ministro ha explicado que estas cifras se las ha facilitado el ministro del Interior de Marruecos, Mohamed Hassad, con quien se reunió recientemente en París, y que también han sido corroboradas por los servicios de inteligencia españoles.

Hoy en Ceuta han querido entrar 1.500 inmigrantes. La primera oleada se ha producido a las 5.30 horas por unos 1.200 subsaharianos que han intentado acceder a la frontera en tres grupos. Las dos primeras tandas han sido rechazadas por la Gendarmería marroquí, que ha incrementado en las últimas horas la presencia de militares en las inmediaciones de la frontera de Ceuta. La tercera oleada ha optado por huir.

El asalto ha vuelto a repetirse a las 08.30 horas con otros 500 inmigrantes por el Tarajal, el mismo lugar en el que se produjo la tragedia del pasado día 6, que ha sido frenado nuevamente por la policía marroquí. Ninguno de los inmigrantes se ha lanzado al mar para intentar entrar en Ceuta.

Mientras, en el plano político, la portavoz del PSOE el Congreso, Soraya Rodríguez, ha anunciado hoy mismo que pedirá la reprobación del titular de Interior tras la negativa de la Junta de Portavoces del Congreso, con mayoría del PP, a abrir una comisión de investigación sobre los sucesos en los que fallecieron quince inmigrantes.

Desde el PP, el diputado José Antonio Bermúdez de Castro ha justificado la oposición de los populares a la comisión de investigación ya que la consideran innecesaria puesto que el Gobierno y el ministro del Interior, ha dicho, han dado "cumplidas explicaciones" con un ejercicio de transparencia "sin precedentes".

Sobre el terreno, la Policía Nacional ha decidido mantener el refuerzo establecido en los pasos fronterizos de Melilla, una medida preventiva adoptada después de que esta mañana se detectaran "numerosos grupos de inmigrantes" en dirección a la ciudad autónoma, aunque ninguno de ellos logró acercarse.

También en Ceuta, la Policía y la Guardia Civil se mantienen en situación de alerta ante la posibilidad de que los inmigrantes que han sido rechazados esta madrugada vuelvan a intentar la entrada por algún otro punto del perímetro fronterizo.

En esta ciudad autónoma, el PP ha convocado una concentración en apoyo a la Guardia Civil y, en Melilla, su presidente, Juan José Imbroda (PP), ha pedido al Gobierno que adopte medidas "firmes" que impliquen un cambio legislativo en la normativa de extranjería, como una de las vías para frenar la extrema presión migratoria que está padeciendo la ciudad.

Por otra parte, la Unión de Guardia Civiles (UGC) ha presentado en la Audiencia Nacional una querella contra la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, por calumnias e injurias al considerar que sugirió que la actuación de los agentes causó la tragedia de Ceuta.

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