Tecnología inteligente de los pies a la cabeza: un móvil en la muñeca, una cámara en los ojos, un cargador en el pecho...

Samsung acaba de presentar su primer reloj inteligente, el Galaxy Gear, en la IFA de Berlín, una de las principales ferias de electrónica del mundo. En ese mismo escenario, Sony ha desvelado la segunda versión del suyo, el 'SmartWatch', que se cuenta entre los pioneros de uno de los sectores tecnológicos de moda, el de los accesorios inteligentes.

Apple y Google, que habitualmente no acuden a esta feria porque prefieren organizar sus propios eventos, también están trabajando para competir por la muñeca de los usuarios. Sobre la apuesta de la firma de la manzana mordida, el supuesto iWatch, llevamos meses leyendo rumores. La segunda, por su parte, acaba de comprar una empresa que se dedica... Qué casualidad, a la fabricación de relojes inteligentes.

Ninguno de los gigantes quiere quedarse descolgado, por si salta la liebre y, como sucedió con las 'phablets', resulta que no es una moda pasajera sino una tendencia de futuro. Pero no solo de relojes vive la moda inteligente. Como todos sabéis, las gafas inteligentes de Google llevan ya un tiempo dando vueltas en manos de unos cuantos elegidos. Su fecha de lanzamiento aún se desconoce, pero la expectación es máxima y, polémicas sobre la privacidad aparte, cada día son más los que ansían hacerse con un par.

Y esto no es todo. La fiebre del 'wearable computing' ha llegado a muchas otras partes de nuestra (futura) indumentaria. Anillos, calcetines, brazaletes, pulseras, camaleónicos atuendos de camuflaje, prendas con paneles solares para cargas dispositivos... Todo es susceptible de abandonar su fría y sosa versión analógica para sumarse a la moda inteligente.