El kamikaze activó su bomba en el Village Restaurant, en el sur de la capital, frecuentado principalmente por periodistas y funcionarios del gobierno.
"Había varios periodistas y otras personas en el restaurante cuando el kamikaze se hizo estallar, pero gracias a Dios fue el único que murió en la explosión, y tres civiles resultaron heridos", declaró Abdulahi Ibrahim, un responsable de la policía.
"Hubo una gran explosión y vi a gente herida", explicó Idris Abdi, un testigo. El kamikaze "tenía como blanco a unos periodistas que tomaban té. Estos huyeron, tras desconfiar de este hombre que tenía cables pegados al pecho".
El Village Restaurant ya sufrió un atentado por parte de dos kamikazes en septiembre de 2012, con un saldo de unos 15 muertos.
El ataque del sábado no fue inmediatamente reivindicado, pero los islamistas somalíes shebab, leales a Al Qaida, atacan con frecuencia en Mogadiscio.
Los shebab controlan vastas zonas rurales, desde las que llevan a cabo operaciones de guerrilla y atentados suicida, a menudo contra el gobierno somalí o la fuerza militar de la Unión Africana en Somalia (Amisom).
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