Estambul, 9 ago.- Al menos un soldado turco ha muerto y otros once han resultado heridos cerca de Esmirna, en la costa del Mar Egeo, al sufrir su vehículo un ataque armado.
Según la edición digital del diario turco Hürriyet, los atacantes tendieron una emboscada a un autobús de transporte militar en Foça, un municipio de Esmirna, en la costa occidental de Turquía, al detonar una mina colocada en la carretera y acto seguido dispararon contra el vehículo detenido con armas de largo alcance.
El ataque tuvo lugar a las 05.00 GMT y ocho minutos después de iniciarse el tiroteo se produjo una segunda explosión que aumentó el número de heridos, añade el diario.
Entre los soldados que ocupaban el autobús, de 24 plazas, hubo al menos 11 heridos, uno de ellos grave, además del fallecido, pero se teme que el número de muertos pueda aumentar, agrega Hürriyet.
Aparte de ambulancias y bomberos, un contingente militar apoyado por helicópteros se dirigió al lugar para iniciar una operación contra los atacantes.
El director de Seguridad de Esmirna, Ali Bilkay, confirmó a la agencia semipública Anadolu el ataque de Esmirna y la muerte del soldado, pero no atribuyó responsabilidades ni dio datos sobre el número de heridos.
La táctica de frenar un convoy militar mediante la explosión teledirigida de una mina y disparar después a sus integrantes es típica del ilegal Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda que combate contra el Gobierno turco.
Ayer murió un soldado turco tras ser herido por la explosión de una mina en la provincia de Sirnak, en el sureste del país.
Pero el PKK limita este tipo de acciones prácticamente siempre a las provincias del sureste, donde habita una mayoría de población kurda y para la que reivindica cierta forma de autodeterminación, aunque también se le han atribuido este año tiroteos contra vehículos de la policía en Estambul.
Algunos medios turcos, como CNNTürk, ya dan por hecho que el ataque de Esmirna es obra del PKK, dada la táctica seguida, propia de una guerrilla bien armada y experimentada.
También Firat, una agencia de noticias cercana al movimiento rebelde kurdo, insinúa que el ataque es obra del PKK, relacionándolo con los combates de esta guerrilla en la provincia de Hakkari.
Desde hace dos semanas continúa un encarnizado combate entre el PKK y el Ejército en los montes de Semdinli, un municipio de Hakkari, fronterizo con Irán e Irak.
En este enfrentamiento, llamativo por su larga duración y por desarrollarse en parte en zonas habitadas por civiles, han muerto ya 115 guerrilleros y dos soldados, según informó esta semana el Ministerio de Interior.
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