Una mujer condenada a seis años deja la cárcel gracias al Cautivo de Melilla

  • Una mujer, condenada a seis años de cárcel por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, se ha convertido hoy en la decimocuarta liberada por intercesión de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío de Melilla.

Melilla, 17 abr.- Una mujer, condenada a seis años de cárcel por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, se ha convertido hoy en la decimocuarta liberada por intercesión de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli y María Santísima del Rocío de Melilla.

El acto de liberación, que supone uno de los momentos más importantes de toda la Semana Santa melillense, se ha desarrollado sobre las 22:30 horas en la Avenida Juan Carlos I, en presencia de las principales autoridades de la ciudad autónoma y de cientos de personas.

La penada se sumó a la procesión, vistiendo la túnica y capucha morados que la Cofradía había entregado previamente a los responsables de la prisión.

La mujer indultada, E.L.G., fue condenada el 8 de marzo de 2011 por la Audiencia Provincial de Málaga en Melilla a la pena de seis años de prisión, una condena que inició el 27 de enero de 2012, tras pasar 526 días en prisión preventiva, según el auto de liberación, firmado por el juez de Vigilancia Penitenciaria Juan Rafael Benítez Yébenes.

La fecha de extinción de la condena está fijada para el 16 de agosto de 2016, aunque el cumplimiento de las dos terceras partes de la misma tendría lugar en agosto de 2014.

El juez justifica la libertad condicional, adelantada al cumplimiento de las dos terceras partes de la condena, por su "intachable conducta, escasa peligrosidad social y bajo riesgo de reincidencia, carencia de responsabilidades civiles y sus circunstancia familiares".

El beneficiario de esta medida de gracia es seleccionado por la Junta de Tratamiento de la prisión melillense, que integra a psicólogos, educadores y juristas, y este órgano posteriormente eleva el expediente al juez de Vigilancia Penitenciaria.

Es el juez quien decide sobre el adelantamiento del tercer grado y la libertad condicional para el recluso, de cuya tutela, apoyo moral e inserción laboral se responsabilizan durante un año la Cofradía del Cautivo y el Voluntariado Cristiano de Prisiones.

El objetivo de esta medida es el de cumplir la labor primordial de la reeducación y reinserción social de los sentenciados a penas privativas de libertad.

Desde 2001, el Cautivo ha liberado a catorce presos, once hombres y tres mujeres, de los que la mitad de ellos confesaban la fe musulmana.

Mostrar comentarios