Soria, 4 sep.- El Numancia dejó escapar los dos primeros puntos de Los Pajaritos, frente a un diezmado Nástic, merced a su falta de acierto en el remate, en especial de Natalio, que no tuvo su día en el primer partido del equipo rojillo ante su afición.
El equipo rojillo hizo más para ganar, aunque sin grandes alardes de juego, pero perdonó lo que no se debe perdonar ante la meta contraria y lo pagó en los puntos. Natalio, a tres minutos para el final, marró una ocasión que ya se cantaba gol en la grada, tras un pase hacia atrás de Bedoya.
En el minuto 60, tuvo otra ocasión -menos clara- en otra jugada de corte similar, en una subida del lateral Unai. Y en el 49, con toda la meta para él, comprobó como Rubén Sanz le sacaba una mano milagrosa para despejar a córner.
Fueron las ocasiones más clara de la segunda mitad, por lo general de peor nivel futbolístico que la primera, y que podía haber servido para amarrar los puntos al equipo soriano, ante un rival que se conformó con el empate en esta fase del encuentro y lo fió todo su potencial ofensivo a algún balón largo que pudiera cazar Powel.
Los dos equipos saltaron al césped con el mismo dibujo táctico y con la intención de hacer de la presión su principal arma para hacer daño al rival. Con estos pronunciamientos, bien fijadas las posiciones en ambos contendientes, el primer cuarto de hora se paso sin generar ocasiones y con los dos conjuntos intentando buscar sin éxito, a través de pases largos, la defensa adelantada de su rival.
Al Numancia le faltaba elaboración en la medular, circulación de balón, para generar huecos y ocasiones. Y estas llegaron cuando Julio Álvarez, escorado a la izquierda, conectó con el balón. Una combinación suya con pase atrás para Natalio (min. 21) no fue aprovechada por éste, que disparó demasiado centrado, a las manos de un buen colocado Rubén Pérez.
Un instante antes Del Pino había evitado la penetración de Peragón con peligro en el área grande numantina, en lo que fue el acercamiento con más intención del conjunto catalán en la primera parte.
Las ocasiones cayeron del lado rojillo en los últimos veinte minutos. Fue suficiente con que bajase el balón al césped y lo hiciese circular con velocidad, con caídas a las bandas, para que Lago Junior llevase peligro por la derecha, aunque después, a la hora de centrar, lo hiciese demasiado cerrado, a las manos de Rubén Pérez.
La ocasión más clara no surgió de la elaboración sino de un pelotazo defensivo que se tragó la defensa catalana y que Natalio aprovechó a medias. Ganó la espalda, encaró al portero pero se durmió un segundo, el suficiente para que llegase al cruce el central Juste.
Ficha Técnica:
0 - Numancia: Eduardo; Unai, Jaio, Pavón, Ripa; Del Pino (Bedoya, min. 80), Sunny (Nagore, min. 58), Larrea, Julio Alvarez; Lago Junior (Juanjo, min. 76), Natalio.
0 - Girona: Rubén Perez; Ruz, Mairata, Sergio Juste, Mingo; Adrián Luna (Powell, min. 55), Seoane, Arzu, Raúl Fuster; Peragón (Bueno, min. 86), Eloy Gila (Rico, min. 67).
Árbitro: Arcediano Monescillo (comité castellano-manchego). Enseñó cartulina amarilla al numantino Sunny (39) y al visitante Juste (min. 69)
Incidencias. Estadio Los Pajaritos. Alrededor de 4.000 aficionados. Antes del inicio del encuentro, las radios sorianas acudieron con un notario para levantar acta de la prohibición del Numancia de dejarles acceder al estadio primer partido oficial en Los Pajaritos. /
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