Ruth Beitia, entre el atletismo y la política

Cuando Ruth Beitia, campeona olímpica este sábado en el salto de altura de Rio-2016, deje el atletismo no tendrá que buscar una nueva ocupación porque ya la tiene: la política, su segunda pasión.

Beitia decidió hace una década aceptar una propuesta del Partido Popular (conservador), el partido del actual presidente del gobierno en funciones Mariano Rajoy, para sumarse al proyecto de la formación en su región, Cantabria.

Desde entonces, Beitia, que tiene 37 años, compagina atletismo y política. Plenos en el Parlamento regional cántabro, donde es ahora diputada en la oposición y donde ha trabajado en diversas áreas que le gustan especialmente, relacionadas con deporte, igualdad o discapacidad.

En sus intervenciones públicas y en las redes sociales, Beitia no tiene problemas en dejar claros sus colores políticos y en apoyar a Mariano Rajoy, que también acostumbra a dedicarle unas palabras afectuosas después de cada éxito deportivo.

"Imparable Ruth Beitia. Leyenda del atletismo español", escribió ya el presidente en funciones Mariano Rajoy en Twitter el pasado mes, cuando la saltadora se colgó el oro en el campeonato continental en Ámsterdam.

Ella también se alegró públicamente por la victoria electoral de su partido político a finales de junio en las elecciones a la presidencia, aunque se ha mostrado preocupada por los problemas que perduran para que Rajoy pueda conformar un gobierno.

"Es algo que me preocupa, que no haya todavia gobierno. España ha crecido mucho en los últimos años y yo apoyo a Mariano Rajoy", afirmó.

"Ser política para mí es sobre todo escuchar. Ir a ver a la gente y escuchar sus problemas, para intentar ayudar y solucionarlos. No hay que dejar de escuchar", afirmó sobre cómo concibe su actividad en los despachos.

Beitia no suele preocuparse por si posicionarse sobre temas polémicos puede hacerle ganar o perder fans.

Además de la política, toma partido en el debate sobre la tauromaquia, posicionándose a favor de un espectáculo criticado duramente por defensores de los animales.

En su Twitter difunde informaciones sobre festejos taurinos y se mostró muy apenada por el fallecimiento del torero Víctor Barrio en pleno festejo en Teruel.

La decisión con la que afronta las cuestiones políticas las ha dejado ya sobradamente acreditadas sobre la pista.

Casi desde niña entra con Ramón Torralbo, que sigue siendo su entrenador y al que dedica siempre los triunfos, considerándolo parte indisociable de cualquier victoria.

En su largo palmarés sólo faltaba una medalla olímpica, su asignatura pendiente. Y la aprobó con sobresaliente. Al aire libre ganó el bronce mundial en Moscú-2013 y ha ganado los tres últimos Europeos, mientras que bajo techo acumula nueve metales entre Mundial y Europeo, entre ellas el oro continental de 2013 y dos platas mundiales, la última este mismo año en Portland (Estados Unidos).

Después de los Juegos de Londres tenía previsto retirarse. Quedó cuarta. Rozó la medalla. Y se lo pensó.

Afrontó un nuevo ciclo olímpico, que le llevó a sacarse la espina en Rio-2016 y poner un broche perfecto a una larga carrera que escribe sus últimas páginas.

Quién sabe si para la chica de oro del atletismo español la carrera política no ha hecho nada más que comenzar.