El Camp Nou volvió a disfrutar de la mejor version del Barça, que volvió a morder, a robar balones en la frontal del área riva y a combinar con velocidad - especialmente en la primera mitad-. Esta mezcla, junto a la candidez defensiva de la Real Sociedad, se tradujeron en el resultado final de 4-1.
Lo primero que hay que destacar es que la Real Sociedad se pudo adelantar en el marcador. Entonces el partido seguramente hubiera sido diferente, pero el larguero no lo quiso así. Seferovic chutó desde la frontal del área, Valdés fijó la mirada en el balón sin poder despegar sus pies del suelo, pero la madera repelió el esférico.
Éste fue el único síntoma de vida en la Real Sociedad, por que lo siguiente que hizo fue borrarse del partido con un tremendo error defensivo. Alexis centró desde la derecha, ningún realista se atrevió a meter el pie, ni Claudio Bravo las manos, y Neymar empujó el balón para estrenar su cuenta goleador en la Liga.
El desbarajuste en la zaga realista era de escándalo, Neymar se convirtió entonces en asistente y Messi se lanzó en plancha en el segundo palo para hacer el segundo gol del Barça con la cabeza a los 7 minutos de juego. Se esperaba fiesta en el Camp Nou.
Por momentos los bajitos combinaban a toda velocidad ante la atenta mirada de los realistas. Xavi de tacón, Iniesta de espuela, pase al hueco, recorte precioso de Neymar, remate fallido de Messi y el Camp Nou en pie. 'Tiki -taka' y del bueno, del de toda la vida.
Para colmo de males, Xabi Prieto tuvo que retirarse por lesión. Arrasate intentó cambiar el plan y metió al campo a Agirretxe junto a Seferovic, por lo que paso a jugar con dos puntas. Pero no sirvió de nada. A la siguiente judada, Messi estrelló en balón en la madera y el rebote lo enganchó Busquets desde la frontal para hacer el tercero con un zurzado impresionante.
La segunda mitad se disputó para saber los goles que quería marcar el Barcelona. La Real no presionaba en el campo rival, pero tampoco se atrincheraba en su área aguantando el chaparrón. La línea defensiva estaba a unos 20 metros de la frontal del área y el Barça tocaba en tres cuartos de campo sin ningún problema hasta que encontraba huecos para crear peligro.
Pero como esto es fútbol, quien marcó fue la Real Sociedad. Agirretxe bajó un balón en el área, Piqué devolvió a los visitantes sus errores de la primera mitad y De la Bella empujó el balón en el segundo palo. Valdés no pudo hacer nada.
Entonces apareció un actor secundario, Marc Bartra -que entró por un lesionado Macherano- para volver a ampliar las distancias. Messi puso un centro raso al primer palo y por ahí apareció el central, que anotó con un buen taconazo.
Con todo resuelto, el Camp Nou se dedicó a despedir con dos ovaciones a Neymar y Messi, que no se marchó enfadado, pero si con un rostro serio por no poder disputar los 90 minutos. No había tiempo para más, el Barcelona ha comenzado como un 'tiro' y Martino ya ha igualado el mejor inicio liguero de un entrenador debutante.
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