Sevilla.- El entrenador del Athletic Club, Joaquín Caparrós, ha señalado tras el 4-3 con el que concluyó el choque del Ramón Sánchez Pizjuán ante el Sevilla que su equipo se va "con una rabia grande, porque un equipo que marca tres goles no puede perder".
El técnico del conjunto vasco comentó que "el Sevilla ha tenido una gran eficacia" y que el Athletic debía "haber sido más contundente en defensa".
"En el primer tiempo tuvimos opciones en los primeros minutos, después llegaron esos goles, que no sé cómo no lo pueden meter", dijo el preparador utrerano.
Caparrós, preguntado por la rigurosidad de los dos penaltis señalados contra el Athletic, afirmó que no se puede meter a opinar sobre la labor de los árbitros, pero insistió en que esas jugadas no deberían haber llegado si su equipo es "mucho más contundente".
También reconoció que el segundo penalti (4-2) "mató" al Athletic porque estaban "en el partido y quedaba mucho tiempo por delante".
"Como entrenador no me puedo quedar sólo en los penaltis y los árbitros, eso lo juzgáis vosotros, pero nos faltó contundencia", reiteró.
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