El Madrid vuelve de Turquía con un gran tesoro: las semifinales de la Champions League. Es el tercer año consecutivo que los blancos llegan a la penúltima ronda de la máxima competición europea. Sin embargo, los blancos también se traen de Estambul un par de lastres: la lesión de Essien y la doble cartulina de Arbeloa.
Así, en estos momentos, y hasta que se conozca el alcance de la lesión del ghanés, Sergio Ramos sería el único lateral derecho natural de la plantilla. El principal culpable de que se así no es otro que Álvaro Arbeloa.
El exjugador del Liverpool saltó al campo a la media hora de partido en lugar de Essien. Durante los sesenta minutos que disputó, el defensa no tuvo reparo en meter la pierna y el cuerpo para evitar que los jugadores del Galatasaray le superaran.
Sin embargo, fue en el minuto 89 cuando vio su primera cartulina amarilla. Hasta aquí todo iba bien. Empero, mientras se alejaba del árbitro y al ver que éste le mostraba la tarjeta, se llevó el dedo a la frente indicándole al colegiaod que estaba loco. Lannoy, colegiado galo, no se lo pensó y le mostró la segunda amarilla y, por ende, la roja.
En condiciones normales Arbeloa solo debería perderse los dos partidos de las semifinales. Empero, tanto si el árbitro refleja en el acta que el jugador le menospreció o le insultó como si la UEFA decide actuar, al lateral podría caerle una sanción mayor. En ese caso, Arbeloa se habría despedido de la Champions esta temporada y no jugaría la final en caso de que el Madrid llegara hasta esa última ronda.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios