El Herbalife Gran Canaria apela a su cancha para desafiar a la historia

Las Palmas de Gran Canaria, 3 jun.- El Herbalife Gran Canaria apelará al calor del Centro Insular de Deportes (CID) para desafiar a la historia e iniciar una épica remontada tras el 2-0 cosechado ante el Barcelona Regal en tierras catalanas, un resultado que nunca fue volteado en las 27 semifinales disputadas en la ACB.

Desde 2005, el conjunto amarillo se ha impuesto al plantel azulgrana en 7 de los 10 últimos enfrentamientos que han disputado en la cancha de la Avenida Marítima.

En cualquier caso, el cuerpo técnico del cuadro isleño se centra ahora en la recuperación física y anímica de un equipo, que en las dos derrotas ante el Barcelona ha podido arañar el triunfo pese a la profundidad del banquillo del conjunto dirigido por Xavi Pascual.

Así, el australiano Brad Newley, quien ayer firmó 17 puntos y 9 rebotes, apeló a esa confianza adquirida por la plantilla isleña para solicitar, en declaraciones a la web del club, el apoyo de la afición en el duelo del miércoles.

"Queremos ver a todo el mundo en el CID. Será algo grande y queremos que estén allí para que nos apoye como nuestro sexto hombre", dijo.

Por su parte, el técnico de los amarillos, Pedro Martínez, incidió en el sabor amargo de la segunda derrota (77-73) tras del despliegue de sus pupilos: "Sabe muy mal después de tanto esfuerzo y lucha, pero lo que hemos hecho es el camino para ganar", aseveró.

En el apartado médico, el escolta estadounidense Ryan Toolson parece haber olvidado prácticamente las molestias en los isquiotibiales y en la rodilla, después de firmar 20 puntos en el segundo asalto del Palau Blaugrana.

Como contraste, el pívot caboverdiano Walter Tavares pasó la noche de ayer en observación en el hospital como precaución por el golpe sufrido en la cabeza tras un lance con el balcánico Ante Tomic en el segundo cuarto del choque del domingo.

Pese a estar descartada cualquier lesión por parte del interior isleño, los galenos del club claretiano reservan su concurso a la espera de las últimas pruebas.