El Inter, sin Mourinho, al borde de la eliminación

  • El Bayern de Múnich puede acabar con el vigente campeón en octavos de final. El 0-1 conseguido por los bávaros en Milán deja al Inter con un pie fuera de la competición. En Italia echan de menos a Mourinho, el estratega con el que todo parecía posible y que dirigió al equipo al triplete.
El Bayern y el Inter juegan el segundo acto de la revancha de la última final
El Bayern y el Inter juegan el segundo acto de la revancha de la última final
Jorge Ramírez Orsikowsky

El campeón está contra las cuerdas. Cuando el Inter de Milán conquistó la pasada Champions en el Bernabéu, nadie podía imaginarse que menos de un año después iba a encontrarse entre la espada y la pared en octavos de final. Pero, así es. El equipo neroazzurro se jugará la clasificación en el Allianz Arena ante un Bayern de Múnich que ya salió vencedor (0-1) del duelo en Italia.

Lo peor para el Inter es que ya no está en el banquillo José Mourinho, el entrenador que llevó al equipo a conquistar la Champions 45 años después y también a cerrar un histórico triplete. El técnico portugués se mostró la temporada pasada como un estratega a la hora de plantear las eliminatorias, sobre todo ante el Chelsea y el Barcelona. En la primera, precisamente en octavos de final, el Inter fue capaz de ganar a los ingleses los dos partidos aunque parecían a priori inferiores. El conocimiento de 'Mou' de su ex equipo fue clave en los planteamientos y en Inglaterra se rindieron una vez más a The Special One.

Más tarde, en semifinales, se cruzó en el camino del Inter otra vez el Barcelona, que ya había quedado por delante de los italianos en la fase de grupos: victoria azulgrana (2-0) en el Camp Nou y empate sin goles en el Giuseppe Meazza. Los de Guardiola eran los grandes favoritos para conseguir el título, pero Mourinho fue capaz de meter a su equipo en la finaljugando al contragolpe y con dos sistemas defensivos, sobre todo el de Barcelona tras la expulsión de Motta.

Una plaga de lesiones

Tras la marcha de Mourinho al Real Madrid llegó Rafa Benítez, todo un Campeón de Europa que se encontró un equipo en el que Massimo Moratti, por primera vez, decidió no invertir. El técnico español solicitó encarecidamente al presidente refuerzos y que, en el caso de que no llegaran, cambiara los objetivos del club ya que iba a jugar en desventaja con sus rivales.

Los refuerzos no aparecieron, pero Benítez nunca quiso ser un problema para el Inter y así lo demostró al llegar a un acuerdo con Moratti para desvincularse del club tras ganar el Mundialito en el mes de diciembre en los Emiratos Árabes Unidos.

Al español le ha seguido en el banquillo el brasileño Leonardo, que se ha encontrado con las lesiones que están sufriendo piezas clave del equipo. Para jugarse el todo por el todo en el Allianz Arena, Leonardo tiene siete jugadores cuya presencia en el once inicial es dudosa. Con sólo mirar la lista, es posible imaginarse el nerviosismo, o la resignación, del entrenador brasileño. Motta, Cambiasso, Chivu, Lucio, Ranocchia, Zanetti y  Maicon, éste último por culpa de un resfriado. Casi nada.

Se le acumulan los problemas a Leonardo, que tendrá que arriesgar con el planteamiento. Al Inter sólo le vale ganar, y necesita tanto marcar como no recibir goles que dejen imposible la clasificación. Esto último, ante un equipo que cuenta con Robben, Ribery, Müller o Gómez parece un milagro. El Bayern tiene mucha pólvora y, además, quiere la venganza por la final perdida en el Bernabéu.

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