El Levante festeja con su afición y las autoridades el ascenso a Primera División

El Levante festejó a lo grande su ascenso a Primera División, en una jornada vespertina en la que realizó una ofrenda floral a la patrona de la ciudad, y visitó la Diputación y el Ayuntamiento de Valencia, donde se congregaron miles de aficionados a pesar de la lluvia.

La comitiva levantinista partió desde el estadio 'Ciutat de Valencia', donde la plantilla, cuerpo técnico y consejo de administración, se subieron a un autobús descapotable personalizado con imágenes de los futbolistas y con la leyenda 'Volvemos'.

A las siete de la tarde centenares de aficionados despidieron al autobús que se dirigió hacia la Basílica de Valencia, mientras los jugadores ataviados con bufandas y banderas saludaban a los aficionados por el camino.

En el interior de la Basílica de la Virgen de los Desamparados esperaba a la comitiva el Obispo auxiliar de Valencia, Enrique Benavent, quien señaló que "todos deseamos que el próximo siglo estemos siempre en Primera división. Sois un referente y un ideal para los jóvenes, por vuestro valores y humanidad podéis ayudar a la juventud a ser mejores".

Por su parte, el presidente Quico Catalán dirigió un discurso a la Virgen a la que agradeció su apoyo para conseguir el soñado ascenso. El acto concluyó con una ofrenda floral por parte de los jugadores Samuel, Ballesteros, Robuste y Xisco Nadal, en nombre de toda la plantilla, tras la cual se dirigieron a pié hacia la Diputación de Valencia.

Alfonso Rus, presidente de la Diputación, recibió a la comitiva levantinista a los que felicitó y agradeció "el esfuerzo realizado para tener dos equipos de la provincia en Primera" a pesar de las dificultades económicas y deportivas que han tenido que superar.

Catalán regaló a Rus una camiseta del Levante con la leyenda "Ascenso a 1ª División", la cual tuvo que ponerse ante el requerimiento de los futbolistas, mientras que el presidente de la Diputación regaló al club un cuadro de cerámica conmemorativo pro este ascenso.

Los futbolistas subieron al balcón de la Diputación donde se dirigieron a unos cientos de aficionados que desafiaron a la lluvia. Gritos como "som, som, som de Primera División", "Adiós a segunda, adiós", "Esta es la afició de un Levante campió" o "Se siente se nota, Valencia es granota" fueron proferidos por los futbolistas ante la algarabía de los seguidores.

El último alto en el camino fue en el Ayuntamiento de Valencia, donde se congregaron miles de aficionados. La alcaldesa Rita Barberá recibió a la comitiva y felicitó personalmente a los jugadores uno a uno tras haberse fundido anteriormente en un abrazo con el presidente levantinista.

Una vez en el balcón, el primer en tomar la palabra fue Catalán quien dijo a los aficionados que "os lo merecéis todo, sois muy grandes" y a continuación le comentó a la alcaldesa que "ya tienes un Levante de Primera".

El técnico Luis García Plaza también tuvo palabras de agradecimiento a los seguidores y posteriormente tomó el mando el jugador Pau Cendrós, quien, como ya ocurrió el domingo en el estadio Ciutat de Valencia a la conclusión del partido ante el Castellón, se erigió en el maestro de ceremonias.

El futbolista fue presentando uno a uno a todos sus compañeros y cuerpo técnico, quienes volvieron a entonar cánticos coreados por la afición.