El Madrid vuelve a la cancha del Spirou Charleroi, donde ganó su último título europeo

  • Madrid.- El Real Madrid vuelve al Spiroudome, la cancha donde ganó su último título europeo (la Copa ULEB en 2007), para enfrentarse al campeón belga, que todavía no conoce la victoria, y asentarse en el liderato del grupo.

El Madrid vuelve a la cancha del Spirou Charleroi, donde ganó su último título europeo
El Madrid vuelve a la cancha del Spirou Charleroi, donde ganó su último título europeo

Madrid.- El Real Madrid vuelve al Spiroudome, la cancha donde ganó su último título europeo (la Copa ULEB en 2007), para enfrentarse al campeón belga, que todavía no conoce la victoria, y asentarse en el liderato del grupo.

El Spirou Charleroi cuenta sus partidos por derrotas en la Euroliga, pero eso no significa que los jugadores de Ettore Messina vayan a encontrarse un rival sencillo.

"Tengo un gran respeto por el entrenador Giovanni Bozzi, quien ha ganado muchos títulos y que hizo un gran trabajo en todos los equipos en los que ha estado. Nuestro rival es un equipo bien organizado que está en un lugar en la clasificación que no se merece, después de lo que vimos en sus partidos en Málaga o Atenas", dijo Messina.

Y es que el Spirou, que ha jugado tres partidos lejos de su cancha, siempre ha sido derrotado por estrechos márgenes en el marcador, dando una gran imagen y aspirando al triunfo hasta el final.

"Espero un partido cerrado, un partido difícil que será clave para ambos equipos. Para nosotros significa permanecer en la cima de la clasificación, pero para ellos será una de sus últimas opciones para seguir con vida y alcanzar el 'Top 16'", comentó el entrenador del Real Madrid.

El Spiroudome trae buenos recuerdos al madridismo ya que fue el escenario del último triunfo internacional del equipo, la Copa ULEB ante el Lietuvos Rytas (75-87) el 10 de abril de 2007. La contra es que también perdió en la misma pista, tres años antes, en 2004, la final de la misma competición ante el Hapoel Jerusalén.

"El Spirou Charleroi es un equipo muy completo que sabe jugar duro. Estoy convencido de que nos espera un partido complicado. El partido es todo un reto para nosotros y para llevarnos una nueva victoria deberemos estar muy centrados y no confiarnos lo más mínimo porque el conjunto belga sabe castigar este tipo de errores", apuntó el pívot norteamericano del Real Madrid D'Or Fischer.

La única baja con la que contará Messina será la ya conocida de Pablo Prigioni, convaleciente de la fractura del cuarto metacarpiano de la mano derecha que se produjo en el entrenamiento del pasado 4 de octubre.

Mostrar comentarios