El sueño de las medallas para España pasa por derrotar a Alemania

Para ello, el combinado nacional, como reconoció el propio seleccionador, Valero Rivera, deberá mejorar notablemente su juego ofensivo, tras los numerosos problemas que evidenció el domingo ante Túnez, que por momentos maniató al equipo español.

Un problema, que podría ser mortal, ante el conjunto alemán, que como advirtió el seleccionador, ha añadido a sus habitual defensa 6-0 un dinámico 5-1, con los extremos Dominik Klein y Uwe Gensheimer como avanzados, que le permite robar muchos balones.

"Ahora también están trabajando un 5-1 que les permite no tener que hacer tantos cambios ataque-defensa para poder correr. Aunque utilicen una u otra defensa estamos preparados", explicó el preparador español.

En este sentido, Rivera se mostró convencido de que España se zafará mañana ante los germanos de los nervios con los que actuó hoy ante Túnez, sabedora de que un tropiezo ante los norteafricanos hubiera dejado al equipo casi fuera de la competición.

"Creo que el equipo estará más tranquilo, el partido que no podíamos perder era el de hoy, y eso se ha notado en el juego del equipo, sobre todo, en los primeros lanzamientos", indicó el seleccionador.

Una tranquilidad que confía en que no merme el excelente rendimiento defensivo del combinado español, que mañana tendrá enfrente a algunos de los cañoneros más temibles del panorama internacional como los laterales Pascal Hens y Holger Glandorf.

Nómina a la que se unirá, tras demostrar hoy ante Bahrein que ya se encuentra totalmente recuperado de la intervención que a punto estuvo de hacerle perderse el Mundial, el lateral izquierdo Lars Kaufmann, autor de nuevo goles ante el equipo asiático.

Aunque si algo está destacando por el momento del concurso de la selección alemana en el Mundial de Croacia es la efectividad de sus extremos, tantos al contragolpe como en ataque estático, como evidencian las brillantes estadísticas de Dominik Klein, Christian Sprenger o Uwe Gensheimer.

Circunstancia que deberá tener muy en cuenta el combinado español, al que tradicionalmente se le ha dado muy bien el equipo alemán, como demuestran las victorias logradas ante los teutones en los europeos de Noruega 2008 y Austria 2010, las dos últimas ocasiones que ambos equipos se han medido en competición oficial.