España 3-0 Bielorrusia: Isco devuelve a 'La Roja' el fútbol de épocas pasadas

    • La selección española no encontró rival en Bielorrusia y camina con firmeza hacia la Eurocopa de Francia 2016.
    • El jugador malagueño fue el mejor del partido por su juego y porque marcó un gol de bella factura.
España gana sin problemas a Bielorrusia (3-0)
España gana sin problemas a Bielorrusia (3-0)

España tiene motivos para ilusionarse. Ver en acción a Isco es como recuperar el tesoro más preciado que habíamos perdido. La fantasía, calidad e inspiración de este jugador nos devuelve a épocas de gloria pasadas en los que los creadores del tiqui-taca nos dieron un Mundial y dos Eurocopas. Isco es la nueva bandera del fútbol espectáculo en La Roja. Con él, si mantiene esta regularidad y deja de ser una promesa para convertirse en una apuesta, se puede soñar con volver a armar un equipo competitivo y ganador.

Isco fue la figura en la victoria de España contra una cavernícola Bielorrusia que planteó un partido ultraconservador. Le duró la resistencia hasta que Isco decidió cómo tenía que castigar su racanería. Fueron trece minutos de calentamiento, de dominio de la pelota, pases de un lado a otro del campo, centros desde la banda derecha por la que entraba Juanfran y una vuelta a empezar. Unos minutos de tanteo en los que Isco iba avisando de que quería la pelota para inventar cosas y acabar cuanto antes con la mediocridad del rival. Le llegó un balón en la frontal del área, lo paró y soltó un derechazo que se coló por la escuadra. Imparable. El portero hizo la estatua. Ni se movió. Siguió la pelota con la mirada. Fue un gol de 'falta' sin barrera por cómo le pegó y la ejecución de su lanzamiento de rosca. Certero. Un golazo que celebró Del Bosque apretando los puños. Los aficionados, entregados a la exhibición de un jugón, corearon el nombre de Isco.

Un minuto después llegó la sentencia con un lanzamiento desde fuera del área de Busquets que tocó ligeramente en la bota de un rival. Otro buen gol para sentenciar al adversario. Busquets demostró que en España también están cambiando conceptos. Se puede tocar y ahora hay que buscar más el disparo desde lejos. Hay que sorprender. Es otra forma de marcar que anteriormente era menos explotada. A partir del dos a cero el partido se acabó y quedó en los pies de Isco. De lo que se le ocurriera a este duende de la pelota dependía el jolgorio de la grada. Los aficionados no pagaron por ver ganar a España. Más bien lo hicieron por ver la función artística de Isco. Cada pelota en la que participaba era una jugada diferente, pasándosela de un pie a otro, girándose, arrancando, parando, eliminando marcadores y jugando a un ritmo y una velocidad difícil de seguir para sus perseguidores.

Del Bosque puso un once con dos delanteros (Pedro y Alcácer). El primero pudo marcar en el minuto 6. Falló lo fácil. No perdonó, en el minuto 54, marcando el tercero con un zurdazo desde dentro del área. Alcácertuvo la ocasión de marcar su gol en el incio de la segunda parte con un cabezazo que se fue cerca del poste. El sistema elegido fue un 4-4-2 con Busquets, Koke, Cazorla e Isco y dos laterales con profundidad (Juanfran y Jordi Alba). Sergio Ramos y Piqué formaron como pareja de centrales y Casillas regresó a la titularidad tras su fallo en derrota contra Eslovaquia. En el inicio de la segunda parte entró Bruno por Busquets. Bruno fue convocado por la baja de Cesc. Es el premio a un jugador, sn foco, que lidera el Villarreal.

El partido, cómodo y controlado, fue aprovechado por Del Bosque para hacer debutar a Callejón por Cazorla. El delantero del Nápoles es el jugador número 50 que debuta con Del Bosque. A falta de doce minutos, el tercer cambio fue el de Morata por Isco. El malagueño se llevó la ovación de la noche, de una afición entregada a las exquisiteces de un jugador que le ha puesto difícil a Ancelotti elegir a quién tiene que quitar para darle más minutos y que ahora tiene el mismo problema Del Bosque cuando estén recuperados Iniesta, Cesc y Silva. El resultado pudo ser más abultado con un disparo de Pedro al poste. España gana en confianza y da otro paso más para estar en la Eurocopa de 2016. Hasta marzo no vuelve a jugar.

Mostrar comentarios