Esteban: "Luis era mucho más cercano y cariñoso de lo que la gente piensa"

Madrid, 1 feb.- Esteban Suárez, portero de la UD Almería, lamentó el fallecimiento de Luis Aragonés, su "padre deportivo" con el que coincidió en dos etapas de su larga carrera, en el Real Oviedo y Atlético de Madrid, y destacó que "era mucho más cercano y cariñoso de lo que la gente piensa".

Esteban se quedó helado al enterarse esta mañana del fallecimiento de Luis Aragonés a sus 75 años. Mantenía una buena relación con el técnico que marcó su carrera, "el mejor entrenador" que tuvo el futbolista más veterano de Primera División. Con el que mantenía una buena relación y hablaban por teléfono.

"Estando en el Almería me decía, usted entrene y estire esto todo lo que pueda que el verde se disfruta siendo futbolista, no de entrenador", recuerda Esteban en su web "estebanportero.com" como uno de los últimos consejos que le dio el 'sabio de Hortaleza'.

"Para mí fue el mejor entrenador que he tenido en mi carrera. Me enseñó mucho como persona, no sólo como futbolista. Le tuve en dos etapas en el Real Oviedo y el Atlético de Madrid y era una persona, que siempre iba más allá que un entrenador al uso, era como un padre. Se preocupaba de todo, hasta de donde invertía o qué coche tenía", reconoce.

Un joven Esteban daba sus primeros pasos en el fútbol profesional en el Real Oviedo cuando coincidió por primera vez con Luis Aragonés. "Siempre me decía que fuese ordenado en la vida y que no hiciese gastos tontos porque cuando dejase el fútbol se me recordaría dependiendo de cómo hubiese invertido y mi posición".

"Si habría invertido bien y me iba bien, dirían que era un gran portero, pero si no lo hacía así asegurarían que era malo o se olvidarían. Me transmitió máximo amor y respeto al fútbol, me decía que pensase que del fútbol tenía que vivir el resto de mi vida y no sólo los años de mi carrera", recordó.

Sus carreras se volvieron a juntar en el Atlético de Madrid y esos años juntos hacen que Esteban destaque la parte personal y más desconocida de Luis Aragonés.

"Ofrecía una imagen muchas veces que no tenía nada que ver con la realidad. De cara hacia fuera en ocasiones era díscolo y con carácter fuerte, pero en el cara a cara era mucho más cercano y mucho más cariñoso de lo que la gente piensa. Gran parte de lo que soy se lo debo a él", afirmó.

La conquista de la Eurocopa 2008 y el estilo que impuso en la selección española provocan que Luis pase a la posteridad. "Ha sido el técnico que será recordado para siempre por cambiar la historia del fútbol español, cuando pasa de la furia al toque con su apuesta por los bajitos. Lo que más marcaba era su carácter. Si le dabas lo que él te pedía, iba a muerte contigo. Eso sí, no le podías fallar nunca".