Sevilla, 12 oct.- El Cajasol afronta mañana en la cancha del Gipuzkoa Basket el primer test oficial de la presente temporada, la segunda del veterano técnico madrileño Aíto García Reneses al frente del equipo sevillano, en la que la que la meta fijada a priori es la de competir sin apuros clasificatorios.
El Cajasol, por convicción deportiva y también por necesidades económicas, ha vuelto a apostar por la juventud de una plantilla que pretende consolidarse en la Liga Endesa y ganar experiencia y rendimiento según avance el campeonato.
La media de edad del equipo sevillano es de 21 años, con tres jugadores con 19 (el base serbio Nikola Radicevic, el alero georgiano Beka Burjanadze y pívot el madrileño Guillermo Hernangómez).
El más joven de la plantilla es el alero letón Kristaps Porzingis, con solo 18 años, mientras que el más veterano es el alero argentino Marcos Mata, con 27, quien además es uno de los refuerzos del este ejercicio.
Con Mata, que llega del Peñarol Mar del Plata de su país, también se han incorporado al equipo el escolta estadounidense Scott Bamforth, que procede del Weber State (Estados Unidos), el base catalán Franch Josep y Willy Hernangómez.
El base checo Tomas Satoransky, con cinco campañas en el club sevillano, debe liderar el juego del equipo después de una pretemporada en la que el Cajasol ha disputado ocho partidos de preparación, con tres derrotas -Real Madrid, Herbalife Gran Canaria y Valencia Básket-.
Con estas bases, el Gipuzkoa Basket será mañana el primer obstáculo en el San Sebastián Arena, una cancha que ha sido hasta ahora favorable a los intereses sevillanos por cuanto han vencido en cuatro de sus seis visitas, la última en el pasado ejercicio (75-77).
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