Griezmann-Özil, los iluminadores del juego ofensivo

La luz inspiradora vendrá posiblemente de uno de ellos: Antoine Griezmann y Mesut Özil han brillado en los partidos de eliminación directa de la Eurocopa, liderando respectivamente el juego ofensivo de Francia y Alemania, que se enfrentan el jueves en Marsella en la semifinal estelar de la Eurocopa.

Después de su larga temporada con el Atlético de Madrid, terminada con la gran decepción de la derrota en la final de la Liga de Campeones (5-3 en penales tras empate 1-1) ante el Real Madrid, se temía por el estado físico del jugador y también por su agotamiento mental. El partido inaugural de la Eurocopa contra Rumanía (2-1) no ayudó a disipar las dudas.

Pero fue ya decisivo en el segundo partido ante Albania (2-0), donde empezó como suplente y logró el gol que desbloqueó la situación en el minuto 90, cuando el partido iba 0-0. No ha dejado de elevar el tono y en los octavos de final fue el salvador, con un 'doblete' para remontar a Irlanda (2-1) y poder alcanzar los cuartos, donde consiguió un gol en el festín 5-2 ante los islandeses.

Con esos cuatro tantos y dos asistencias en el torneo, 'Grizi' domina la tabla de goleadores y confirma que es el líder técnico de la selección de Francia a sus 25 años (32 partidos como internacional, 11 tantos).

Su reposicionamiento en el eje, justo al lado de Olivier Giroud, con el que se ha complementado muy bien, le ofrece libertad para desarrollar su talento.

"Griezmann es un jugador con una gran clase, eso seguro. Tiene una muy buen técnica de tiro y un buen juego con la cabeza. Es un jugador capital para la selección de Francia, no sé si es el jugador más importante, pero es uno de los más importantes", resumió el seleccionador de la Mannschaft.

Después de un Mundial-2014 a medio gas, Mesut Özil (78 partidos internacional, 20 tantos) estaba en el punto de mira de los hinchas alemanes, por no haber cumplidos con las expectativas generadas por su indudable talento.

Igual que la selección alemana, no sedujo con su juego en los dos primeros partidos en esta Eurocopa, pese a que dio la asistencia para el gol de Bastian Schweinsteiger en el debut ante Ucrania (2-0).

El organizador de juego de origen turco -lo que le convierte junto a Jerome Boateng en centro de las críticas de los populistas alemanes, que le reprochan no cantar el himno nacional y su peregrinación a la Meca compartida en Instagram- ha elevado su nivel de juego y con ello el del equipo. Se vio beneficiado sobre todo por la titularización de Mario Gomez en vez de Mario Götze. Gomez es un jugador del perfil de Oliver Giroud, con el que Özil está acostumbrado a jugar en el Arsenal.

Özil jugó muy bien ante Irlanda del Norte (1-0) y también en octavos ante Eslovaquia (3-0), incluso aunque fallara un penalti. En los cuartos de final también respondió a un alto nivel y falló desde los once pasos, enviando al palo su lanzamiento en la tanda decisiva. Pero Alemania sobrevivió a Italia y alcanzó las semifinales.

En ese partido, a centro de Jonas Hector, Özil batió a Gianluigi Buffon y logró el gol que adelantaba a Alemania en Burdeos. Un pase de Özil estuvo a punto de permitir poco después a Gomez lograr el segundo.

El ex del Real Madrid será por lo tanto uno de los principales hombres a seguir por los franceses en el Velodrome marsellés.

"Es un jugador muy, muy talentoso en el pase y la visión de juego", estima Giroud, su compañero de equipo. "Es importante para el Arsenal y para la Mannschaft. Le gusta jugar entre líneas y tendremos que seguirle de cerca", apuntó.