Hernández reconoce que los resultados le proporcionan poca defensa

Alicante, 1 nov.- Quique Hernández, entrenador del Hércules, ha reconocido hoy que los resultados del equipo, penúltimo en la clasificación de Segunda división, son "poca defensa" para mantenerse en el cargo.

El Hércules acumula ocho jornadas consecutivas sin ganar en Liga y desde el seno de la entidad alicantina se ha deslizado que, en el caso de perder ante el Girona, Quique Hernández podría ser destituido.

"Con estos resultados tendría poca defensa", admitió el preparador, quien comentó que, como entrenador, reconoce que "los números son irrefutables" y cualquier duda o comentario sobre su continuidad "son justos".

"Es la ley del fútbol, como el año pasado", sentenció, en referencia a que hace un año llegó a la plantilla en sustitución de un colega como Juan Carlos Mandiá.

Hernández agradeció el apoyo que está recibiendo desde una afición que le está dispensando un trato "exquisito" desde que llegó al equipo la pasada campaña.

"Lo que queda es trabajar, poniendo todo lo que se puede y más para devolver a la afición todo", prosiguió el de Anna, que ve normal que el club maneje alternativas por si fuera destituido porque "no se puede no pensar en el día siguiente".

Hernández intuye que, de no ganar, puede ser su último partido en el Hércules pero confía en lograr la victoria y seguir al frente de la plantilla. Para ello, espera que el equipo mantenga la evolución de las dos últimas semanas, en las que opinó que tuvieron "mucha mala suerte".

Respecto al choque contra el Girona, imagina "un partido parecido al de Soria", contra el Numancia. Opinó que el conjunto catalán "también está por debajo de las expectativas" creadas al inicio de la temporada y recalcó que, para todos los equipos de la categoría, "ganar da mucha confianza".

Quique Hernández ha convocado a los diecinueve futbolistas profesionales que tenía a su disposición y al jugador de la cantera Álex Muñoz, por lo que tendrá que descartar dos hombres antes del partido.

Sólo se ha quedado en Alicante, por sanción, el defensa Aitor Fernández, que cumplirá el segundo de los partidos de castigo que le impuso el Comité de Competición por su expulsión ante el Numancia.