Saint-Amand-Montrond (Francia), 12 jul.- La aceleración del equipo holandés Belkin tras el problema mecánico sufrido por el español Alejandro Valverde ha abierto un debate en el seno del pelotón del Tour de Francia.
El equipo de Bauke Mollema, hasta hoy tercero, incrementó el ritmo del grupo de los favoritos cuando Valverde, segundo hasta hoy, vio como su rueda trasera era víctima de un toque de otro ciclista y se quedaba en la cuneta.
El viento hizo imposible que el corredor del Movistar entrara en el grupo de los favoritos pese a la ayuda de varios compañeros y, al final, se dejó en la meta de Saint-Amand-Montrond casi 10 minutos y todas sus opciones en el Tour.
"Si decimos algo van a pensar que somos malos perdedores", afirmó el director del Movistar, José Luis Arrieta.
Valverde tampoco cargó contra Belkin, aunque sí contra otros equipos que colaboraron, como el Europcar.
"No lo entiendo, no se jugaban nada. Tiempo al tiempo, estas cosas se devuelven", dijo el murciano.
El Tour vivió una situación similar en 2010, cuando Alberto Contador atacó en el puerto de Balés en el mismo momento en el que su principal rival, el luxemburgués Andy Schleck, sufría un problema mecánico.
El español fue duramente criticado por aquel gesto, pese a que se justificó diciendo que no había visto los problemas de su contrincante.
En esta ocasión, varios equipos afearon el gesto de la escuadra holandesa.
El director del Saxo, Philippe Mauduit, consideró que el Belkin no jugó limpio.
"Hay que respetar a un líder como Valverde. Nosotros no nos hemos movido hasta que no hemos visto que la diferencia era insalvable y que no conectaría con el grupo de cabeza", aseguró.
Algo similar a lo que dijo Contador, quien señaló que no colaboraron en el momento de la avería de Valverde.
El maillot amarillo, el británico Chris Froome, fue algo más diplomático, pero también dejó entrever su desagrado con la actitud de los holandeses.
"Si algún día tengo un problema similar no me gustaría que hubiera un equipo que la aprovechara", afirmó.
La memoria del británico es corta. En la Vuelta a España del año pasado, su equipo no esperó a Valverde cuando se cayó en la cuarta etapa. Los Sky, que lideraba Froome, no miraron hacia atrás y el murciano se dejó ese día el maillot de líder.
En el ciclismo, todos tienen historias que contar. Mollema justificó a su equipo diciendo que ya antes de que se produjera el incidente ya habían empezado a tirar del grupo de favoritos.
"Si eso no le ha gustado a Valverde que se mire en el espejo. En el pasado él tampoco ha jugado limpio", afirmó el holandés.
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