Bilbao, 9 nov.- Pese a la presencia del keniano Edwin Kipsang entre los 28.000 inscritos, resulta improbable este domingo 10 de noviembre la caída de las mejores marcas en la clásica Behobia-San Sebastián, hechas en 1996 por los atletas Alberto Juzdado y Rocío Ríos.
Sus cronos de 59 minutos 19 segundos en la categoría masculina y de una hora 8 minutos 54 segundos en la femenina parecen difíciles de mejorar para cualquiera de los más de 28.000 inscritos, aunque lo intentarán el gallego Pedro Nimo, el catalán Marc Roig, el madrileño Chema Martínez y los vascos Alberto Revuelta y Sergio Román así como el keniano Edwin Kiprotich, del que apenas hay referencias.
Roig, tercero en 2009 y segundo clasificado en 2012, se presenta como primer candidato a vencer. El barcelonés de Sant Pol tiene en el horizonte dedicar el triunfo a su hija de dos meses y proseguir su camino deportivo que debe desembocar el 31 de mayo en el maratón de Estocolmo.
El rendimiento de Chema Martínez es una auténtica incógnita. Es sabida su pasional entrega en cada cita atlética, pero viene de sufrir bastante en el maratón de Nueva York y por ello se impone la cautela.
Tampoco ayudarán las previsibles condiciones meteorológicas, por la lluvia y el porcentaje de humedad, pero no impedirán una fiesta más del atletismo popular en la considerada por muchos como la 'prueba reina' del calendario español.
La etapa moderna de 'La Behobia', como la conocen millares de atletas de toda España, arranca en 1979 -con un millar de participantes-y llega a este próximo domingo con un historial sin interrupciones luego de haber sido disputada por 11.000 corredores en 2002 y 25.000 el pasado año.
Sin embargo, la carrera organizada por el Club Deportivo Fortuna -en la actualidad con un presupuesto de más de 840.000 euros y vigente un acuerdo con Adidas hasta 2017- data del 30 de marzo de 1919, el día que ganó uno de los atletas más recordados de todos los tiempos: Juan Muguerza en un tiempo de 1.17:50.
Al día siguiente, la prensa local destacó que fue "un acontecimiento admirado por miles de almas" y recordó que el banquero Andrés Peña había donado "una moneda de oro, de cinco dólares, para el primer atleta que pasara a la altura de Toki Alai", su finca particular enclavada en Ategorrieta.
La prueba, con numerosas interrupciones en el transcurso del tiempo, se llegó disputar por equipos a relevos en varias ediciones y el viejo campo de fútbol de Anoeta congregó a miles de personas para recibir a los ganadores.
En cuanto a la presencia femenina para este domingo, la organización no ha facilitado el nombre de ninguna corredora destacada lo que hace pensar que el pronóstico es tan abierto como desconocida la identidad de las posibles candidatas al podio.
El nombre de Maria Luisa Irizar, que fue una de las más jóvenes maratonistas alineadas en España, aparece siete veces en el palmarés de la carrera.
Dos madrileños pueden ser considerados como 'reyes' de la Behobia-San Sebastián: Alfonso Álvarez Valera, vencedor en cinco oportunidades entre 1981 y 1987, y Alberto Juzdado, otras tantas veces en el tramo de 1995 a 2004.
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