La ONU afirma que Gaza sigue sin reconstruirse siete meses después del alto el fuego

La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos aseguró este viernes que, "más de siete meses después del anuncio de un alto el fuego, ninguna casa totalmente destruida ha sido reconstruida en Gaza".

En su último informe sobre la situación de Gaza, la Unrwa se hace así eco de la situación actual de este territorio palestino, que sufrió un ataque militar entre el 8 de julio y el 26 de agosto del año pasado en el marco de una escalada de hostilidades entre fuerzas israelíes y grupos armados palestinos.

Esta agencia de Naciones Unidas recordó que Naciones Unidas, Israel y la Autoridad Nacional Palestina llegaron a un acuerdo el pasado mes de septiembre para facilitar la entrada de materiales de construcción a Gaza, a pesar de lo cual "el proceso de reconstrucción de viviendas totalmente destruidas parece todavía a convenir".

Por otro lado, la Unrwa indicó unas 60.000 familias de refugiados palestinos en Gaza han sido capaces de completar la reparación de sus viviendas dañadas con la asistencia proporcionada por este organismo de Naciones Unidas, en tanto que otras 10.760 familias que han visto sus casas completamente destruidas han recibido subsidios de cuatro meses.

Un total de 7.072 desplazados internos continúan refugiados en 12 centros de la Unrwa en Gaza y unos 18.700 niños han recibido asesoramiento psicosocial de forma individual desde el pasado mes de julio.

Por otra parte, la Unrwa recalcó que las necesidades humanitarias de Gaza están reflejadas en un reciente informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, en sus siglas en inglés), que señala que 2014 fue "traumático" para cuatro millones de personas que viven en los territorios palestinos de Gaza y Cisjordania y permanecen bajo "una ocupación militar israelí que les impide ejercer muchos de sus derechos humanos básicos".

Ese informe señala que 1,8 millones de palestinos de Gaza soportaron el año pasado "la peor escalada de las hostilidades desde 1967", puesto que en el conflicto con fuerzas israelíes murieron más de 1.500 civiles palestinos (entre ellos más de 550 niños), más de 11.000 resultaron heridos y unos 100.000 continúan desplazados.