¿Un Real Madrid con casi tres meses de competición sin opciones de ganar título alguno? Para el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, no habría pesadilla peor que ésta. Su proyecto podría tambalearse antes de las elecciones del club previstas para junio de 2013. Sería difícil aguantar indemne casi 90 días donde las críticas llegarían desde todos los frentes y en los que la situación del equipo y su entorno podría convertirse en lo más parecido a un volcán en erupción.
Nadie podía esperarse esto al final de la pasada temporada, cuando el equipo dirigido por el portugués José Mourinho y liderado en el campo por su compatriota Cristiano Ronaldo conquistó la Liga batiendo récords. Tampoco nadie podía imaginar un guión así después de que los blancos venciesen en la Supercopa de España a su gran rival, el Barcelona. Pero estas gestas parecen muy viejas apenas tres meses después, cuando las noticias malas se acumulan.
La última, el rival del Real Madrid en octavos de final de la Champions League. A Iker Casillas y compañía les ha tocado el Manchester United en el camino hacia la ansiada Décima. El segundo puesto en el grupo D les condenaba a tener un rival muy duro en el cruce de octavos, y así ha sido. El equipo inglés es líder en la Premier League y ha jugado tres de las últimas cinco finales de la Champions. La eliminatoria se desarrollará entre febrero (el partido de ida será el 12 o el 20) y marzo (el partido de vuelta se disputará el 5 o el 12). El choque de vuelta será en Old Trafford mientras que la ida se disputará en el Santiago Bernabéu.
El rival es un viejo conocido del Real Madrid. En el siglo XXI, se ha enfrentado dos veces en eliminatorias al tricampeón de Europa, y en ambas ocasiones el conjunto español salió vencedor. La primera fue en 2000, cuando Fernando Redondo maravilló en el 'Teatro de los sueños' con su regate de tacón y posterior pase de gol a Raúl González. Fue el año de la octava Champions de los blancos. La segunda vez fue en 2003, cuando Ronaldo logró un 'hat-trick' en el mismo campo. en las dos ocasiones, los blancos jugaron primero en casa.Malos resultados en las otras competiciones
En la Copa del Rey, los blancos tendrán que remontar el 9 de enero el 2-1 adverso con el que volvieron de Vigo. De superar la eliminatoria contra el Celta, el rival en cuartos de final sería Osasuna o el Valencia, posiblemente este último (0-2 en la ida). Esa ronda se disputará los días 16 y 23 de enero. Si el Real Madrid pasase a semifinales, podría tocarle allí el premio gordo, el Barcelona, si éste superase sus enfrentamientos. Ese hipotético doble clásico se disputaría el 30 de enero y el 27 de febrero y sería una final anticipada.
Para el Real Madrid es vital llegar a marzo vivo en esas dos competiciones con formato por eliminatorias. En la Copa, porque le permitiría optar al título en mayo, y en la Champions, porque se metería en la lucha con los ocho mejores equipos. Caer en los dos torneos sería un desastre que esta vez no podría arreglar en la Liga.
El equipo blanco tiene el torneo de la regularidad prácticamente perdido, "casi imposible" en palabras de su entrenador. 13 puntos de desventaja con el Barcelona parecen demasiados para soñar con la remontada. Florentino seguro que prefiere no pensar en tres meses aferrado al clavo ardiendo, y más con las elecciones presidenciales a la vuelta de la esquina. Con opciones de título, en estos momentos su reelección parece cosa hecha, pero sin futuro deportivo, los detractores aumentarían y seguramente le saldrían rivales de cara a los comicios.
Sigue @jorgekosky
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