Las condiciones meteorológicas no permiten la salida antes de 48 horas

Redacción deportes, 16 oct.- La organización de la Mini Transat 2013 -travesía del Atlántico por etapas entre Douarnenez (Francia) y Pointe à Pitre (Guadalupe)- ha anunciado que la salida no se dará antes de las próximas 48 horas, dada la situación meteorológica en el área de Finisterre, descartando la opción de realizar una parada intermedia de la primera etapa en el puerto de Gijón.

La ruta entre la Bretaña francesa y Finisterre está siendo azotada en su margen occidental por vientos muy fuertes del Sudoeste, con gran oleaje. Cerca de la costa las condiciones son mucho más manejables y por esto se estudió la opción de parar en Gijón, pero es una trampa potencial para los competidores, que puedan estar en riesgo de ser atrapados allí y no poder salir de nuevo.

Por el momento, los vientos son particularmente fuertes entre el cabo de Ortegal y el cabo Finisterre, donde se esperan rachas de más de 50 nudos (90 Km/h.) y olas de cinco metros en los próximos días.

La opción de Gijón puede activarse solamente si la escala española permite una espera máxima de dos a tres días antes de cruzar la punta de España. El director de la regata no descarta aún ninguna opción, pero antes está la seguridad de los competidores.

Cuatro regatistas españoles, Bruno García, Joel Miró, Carlos Lizancos y Pilar Pasanau, serán los representantes españoles en esta edición y están en el puerto francés de Douarnenez esperando la salida.

La Mini Transat tiene un recorrido en dos etapas de 4.021 millas náuticas (7.451 Km.). La primera etapa se disputa entre Douarnenez y Puerto Calero (Lanzarote) con un recorrido de 1.257 millas náuticas (2.329 Km.) y la segunda, que tenía su salida prevista para el 9 de noviembre, entre Puerto Calero y Pointe à Pitre, en la isla caribeña de Guadalupe, con 2.764 millas náuticas (5.121 Km.)

En estas edición participan un total de 84 embarcaciones (31 prototipos y 53 de serie) con 74 competidores masculinos y 10 femeninos.