Los grandes estadios de fútbol vertebran las ciudades modernas, según experto

Alfonso Gil

Valencia, 16 jun.- Los grandes estadios de fútbol ubicados en las ciudades más importantes del mundo se han convertido en los ejes que vertebran las tramas urbanas modernas, ya que han influido en la construcción, el desarrollo y la calidad de la escena urbana allí donde han sido implantados.

Esa es la función desarrollada, entre otros, por estadios como Wembley (Londres), Anfield Road (Liverpool), San Siro (Milán), La Bombonera (Buenos Aires), Maracaná (Río de Janeiro), Allianz Arena (Munich), Olímpico de Kiev (Ucrania) o el Azteca (Ciudad de México).

Así lo considera José María Lozano, catedrático de la Universidad Politécnica de Valencia, en su análisis del papel de estos "magníficos edificios" de un alto valor arquitectónico donde los grandes acontecimientos deportivos adquieren la categoría de espectáculo.

Lozano expresa esta opinión en su texto sobre "Las catedrales del fútbol", incluido en el catálogo de la exposición "El planeta del fútbol", que se ofrece en el Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MuVIM) y en el que se destaca el papel ya conocido de los estadios como templos de los tiempos modernos.

Según ha señalado Lozano a Efe, todavía tiene vigor la frase del arquitecto catalán Oriol Bohigas, quien hace más de dos décadas, en los años previos a los Juegos Olímpicos de Barcelona, afirmó que los grande estadios "monumentalizan las periferias de las ciudades".

"Los nuevos recintos tienen problemas por la necesidad de infraestructuras complementarias en torno a la accesibilidad, el transporte para llegar en dos horas y salir en diez minutos, y las bolsas de aparcamiento, además del poco retorno que hay para la sociedad", ha dicho.

"En cambio, a favor cuentan con la capacidad de estimular la zona por el efecto llegada de la nueva infraestructura, con espacios para la hostelería, el comercio, el alojamiento y la revitalización de la trama de la zona", ha indicado.

El comisario de la exposición, el periodista Eduardo Alcalde, insiste en que de la misma forma que las catedrales constituían el centro neurálgico que tejía la trama de las ciudades", ahora "es difícil no considerar la enorme influencia que los estadios generan sobre las urbes".

Para Alcalde, el fútbol requiere la creación de un espacio físico con los parámetros de un teatro y su influencia trasciende al lugar de la ciudad en el que se ubican, incluso en aquellos casos en los que están alejados del núcleo urbano.

Lozano considera que la arquitectura es "el mejor documento histórico, el más fiable", y ha recordado que a pesar de las dificultades económicas de la última década, no han dejado de construirse y de aportar "conocimiento, técnica y estética" al mundo de la arquitectura.

En su análisis de los grandes estadios del mundo, destaca la construcción en un tiempo récord del Centenario de Montevideo para el primer Mundial de la historia, en 1930, o La Bombonera de Buenos Aires, construida en 1940, con "vocación de hito urbano de referencia".

También destaca Lozano la importancia sobre su entorno de otros muchos estadios, desde Maracaná al estadio nacional de Polonia, que actualmente acoge la Eurocopa, sin olvidar los estadios de nueva creación como el de Wembley, proyectado por el arquitecto Norman Foster en 2007.

En este sentido, también ha admitido que estadios como los de Sudáfrica para el Mundial de 2010, el Nido del Pájaro de Pekín o los que se construyan para el Mundial de Catar pueden ser "flor de un día" por falta de utilidad una vez concluido el acontecimiento que ha justificado la obra.

"Actualmente la construcción de un estadio se debe plantear a partir del concepto de su vida útil, más que de la permanencia. No tiene sentido instalaciones para ser usadas dos domingos al mes. Hay que buscar la polifuncionalidad y en una sociedad moderna deben completarse muchas utilizaciones para un estadio", ha dicho.

Sobre los ya construidos, Lozano plantea el concepto del reciclaje, que pasa por dotar de un nuevo ciclo de vida con nuevas aplicaciones a partir del momento en el que una instalación pasa a estar obsoleta", ha concluido.