La lucha contra el 'enemigo invisible' en Roland Garros

El inicio en el torneo de Roland Garros ha estado marcado por la lluvia, que ha retrasado notablemente muchos partidos y aplazados otros, llevando a los jugadores a tener que enfrentarse a un enemigo "invisible" con el que no contaban: la espera.

Fue el caso, por ejemplo, de la española Garbiñe Muguruza, que el lunes sufrió para derrotar a la eslovaca Anna Karolina Schmiedlova después de que su partido, programado para el lunes, fuese retrasado.

El domingo, Muguruza (cuarta favorita en el cuadro femenino) se pasó varias horas en el complejo de Roland Garros hasta que la organización confirmó el aplazamiento de su encuentro hasta el lunes.

"No puedes pensar en el partido durante seis horas. Piensas un rato, te concentras y una vez tienes claro cómo tienes que jugar intentas desconectar un poco hasta que te llegue el momento de jugar", explicó la tenista nacida en Venezuela tras ganar a Schmiedlova por 3-6, 6-3 y 6-3.

¿Y qué se hace durante la espera? "Escucho música con el Ipad, hablo con mi familia, con mi entrenador, juego a cartas... Intento distraerme porque la espera es muy mala antes de un partido, porque te pueden aparecer los fantasmas".

"El pensar es mi enemigo cuando tienes que jugar un partido. Intentas distraerte un poco y desconectar y cuando llega el momento de jugar, te 'enchufas' otra vez", añadió.

Otra de las tenistas 'damnificadas' por la lluvia fue la paraguaya Verónica Cepede, que este lunes dio una de las sorpresas al ganar contundentemente a la veterana alemana Sabine Lisicki.

"Ayer calenté 30 minutos y después esperé a que llegará la hora de jugar, aunque ya se veía que no sería fácil", explicó sobre su jornada dominical esta jugadora, que procede de la fase previa.

"Cuando se confirmó que no jugaría, hice físico ya que estar tres días sin jugar el cuerpo se relaja, me di un masaje, volví al hotel y cené con mi madre y mi hermana que me acompañan aquí", añadió la jugadora nacida en Asunción.

Para Cepede "es muy importante poder estar con alguien y distraerte hablando de cualquier cosa sin pensar todo el tiempo en el tenis".

A diferencia de Muguruza y Cepede, la espera no se tradujo en una victoria para el argentino Leonardo Mayer, que fue eliminado por el francés Jeremy Chardy.

"Como jugaba el último turno se esperaba, pero nos largaron bastante temprano para poder ir al hotel y hasta hoy por la mañana", explicó a la AFP tras su partido.

Mayer admitió que esta circunstancia vivida en París "es algo muy raro que pasan una o dos veces al año" y que lejos de estresarle, aprovechó la espera para "dormir la siesta".

"No hice nada especial", concluyó el argentino.