Madrid.- José Mourinho, técnico del Real Madrid, alentó a la afición madridista que acuda mañana al estadio Santiago Bernabéu, a apoyar al máximo a su equipo en el duelo de octavos de final ante el Olympique de Lyon, y fue crítico al decir que conoce "un Bernabéu tranquilo" que debe cambiar en una cita clave.
"La afición debe jugar porque cuando jugamos fuera de casa siempre lo hacemos contra doce. En Champions los que juegan en casa siempre ponen dificultades por un ambiente de gran apoyo", dijo.
"El Bernabéu que conozco como entrenador del Real Madrid es tranquilo, vive los partidos de un modo muy tranquilo. Hasta ahora no he visto un Bernabéu que haya jugado con su equipo de verdad. Me dicen que aparece a la hora de la verdad llega y mañana lo es, porque a las 11 de la noche o estas en cuartos de final o terminaste tu Champions", añadió.
Respondió Mourinho a las dudas del presidente del Lyon, Jean-Michel Aulas, que espera un planteamiento defensivo del técnico portugués en su estadio, tras el 1-1 cosechado en el partido de ida.
"Nos meteremos atrás y esperamos a que Casillas lo pare todo y sacamos un empate sin goles. Estaremos clasificados. Aulas ha hecho ese análisis, es presidente de su club pero habla como entrenador. A lo mejor tiene razón nos encerramos atrás y jugamos a por el empate", respondió con ironía.
Destacó el entrenador madridista la importancia de la eliminatoria y el factor psicológico que tendrá para su plantilla en caso de superarla. "Es una eliminatoria clave porque cuando llegas a cuartos siempre ves la final en el horizonte".
"Viendo a mi equipo tengo la sensación de que podemos conseguirlo. Verte e cuartos es psicológicamente importante porque te cambia sensaciones para llegar lejos. La autoestima estaría muy alta y la afición si se ve en la siguiente ronda comienza a soñar a acercarse a sacar el billete para la final. Es un momento muy emocionante. Por eso es una eliminatoria fundamental", analizó.
Llegan sus jugadores a la cita "sin miedo" y con ganas de "disfrutar del momento sin pensar lo que se juegan". Para ello, destacó Mourinho que es importante pensar únicamente en el presente.
"Todos tenemos un pasado con cosas positivas y negativas pero eso no juega. Yo normalmente tengo resultados buenos en Champions, llego a semifinales y finales, pero mi récord no juega a mi favor ni los malos resultados del Real Madrid en últimos años juegan en contra", matizó.
Mourinho señaló que su equipo tiene "una pequeña ventaja" porque le vale el resultado inicial para clasificarse. Pero destacó que es mínima, "por eso es una eliminatoria abierta", en la que piensa que se juega tanto el Real Madrid como él.
"Nos jugamos los dos. El Real Madrid ha ganado nueve Copas de Europa y no necesita ganar ninguna más para ser campeón de campeones. Mourinho es uno de los tres entrenadores que ha ganado la competición dos veces con dos clubes diferentes. Si no la gano nunca más continuo en la historia, pero quiero ganarla por tercera vez".
Fue escueta su respuesta al tema del dopaje y la petición del Real Madrid de endurecer los controles. "No entiendo, no quiero entender y tengo rabia de quien entiende".
Y acabó destacando el peligro de su próximo rival y analizando la calidad de Lisandro López. "Es un óptimo jugador que conozco bien del fútbol portugués donde jugó muchos años".
"Es un jugador peligroso pero el Lyon es más que Lisandro, es un equipo muy bueno, bien organizado y con un gran entrenador. En la ida no jugó y fueron muy competitivos. Sabemos como juega y estamos preparados para frenar a un jugador importante", sentenció.
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